Por Margarita Girón
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Tras la emergencia derivada del COVID-19, el Gobierno de Guatemala suspendió los vuelos comerciales desde el 17 de marzo; sin embargo, los vuelos de retornados guatemaltecos no han parado, un connacional originario de Totonicapán, quien fue deportado el 26 de marzo, dio positivo a la prueba del coronavirus.
Derivado del primer caso en un retornado y la vulnerabilidad que representa la situación para los guatemaltecos que comparten vuelo, así como para el personal de Migración, se ha insistido a la Cancillería, para conocer la postura oficial del Gobierno al respecto y confirmar si el Canciller Pedro Brolo, solicitará al Gobierno de los Estados Unidos, suspender los vuelos mientras pasa la emergencia, pero no se ha obtenido el posicionamiento oficial por parte de la Cancillería.
En tanto, los vuelos de retornados programados para el 31 de marzo y 01 de abril fueron suspendidos, según informó el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM). En ese sentido, se consultó si para hoy los vuelos continúan suspendidos, pero al cierre de esta nota, no hubo respuesta.
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91 RETORNADOS HAN SIDO SOMETIDOS A LA PRUEBA
Desde que se implementaron los protocolos en la Fuerza Aérea Guatemalteca, se ha realizado la prueba de COVID-19 a 91 connacionales que han sido deportados de Estados Unidos, de los cuales solo uno ha dado positivo, según informó el Ministerio de Salud. Según datos del IGM entre el 19 y 30 de marzo, llegaron al país 808 retornados.
Anoche se conoció de otro guatemalteco de 45 años, que se encuentra bajo la custodia de Inmigración y Aduanas (ICE) en el Centro Correccional de La Palma, en Tucson, Arizona, dio positivo para COVID-19 y aunque al conocer la noticias, se ha insistido en las acciones del Gobierno en el tema de los vuelos de migrantes retornados, la Cancillería no se ha pronunciado.
