Uno de los eventos que causa preocupación cuando se intenta disfrutar de un descanso en la playa, es cuando alguien sufre un accidente provocado por un alfaque.
Recientemente, causó conmoción el caso de un joven universitario que fue reportado como desaparecido en Sipacate, Escuintla, quien posteriormente fue hallado fallecido a causa de un alfaque.
Este fenómeno es denominado como corriente de retorno o corriente de resaca. Si bien, no se pueden identificar los puntos donde se forman los alfaques, sí se puede observar el comportamiento del agua del mar para reaccionar a tiempo y evitar una tragedia.
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El Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) define un alfaque como «una corriente hacia dentro del mar, que fluye a través de una especie de zanja o río formado por un banco de arena. Este fenómeno natural es una de las causas más comunes de fallecimiento por ahogamiento, pues arrastra a sus víctimas hasta 500 metros».
La entidad advierte que el riesgo se hace mayor debido a que no es visible y el lugar donde se produce aparenta ser un espacio tranquilo.
Además, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) explicó que la velocidad de un alfaque puede variar de un momento a otro y representa un peligro para todos, incluso para el más experto nadador.
Por su parte, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA) indicó que este fenómeno se forma porque las olas acumulan agua a lo largo de la orilla. Luego, esta regresa al mar a través de estrechos canales en bancos de arena cerca de la costa.
La NOAA también detalló que, por lo general, esas corrientes son débiles, pero a veces el agua puede moverse a velocidades de hasta dos metros y medio por segundo, que es más rápido que un nadador olímpico.
SEÑALES PARA ACTUAR A TIEMPO
El IGSS refirió que es posible identificar un alfaque por su coloración, ya que comúnmente su agua se torna oscura o amarillenta.
En tanto, el Insivumeh agregó que se puede observar en el mar una franja agitada y revuelta.
En caso de quedar atrapado en un alfaque, el Seguro Social recomendó no nadar intentando regresar hacia la playa, sino que hay que aprovechar la corriente y avanzar hacia los costados, en una trayectoria en diagonal.
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El Insivumeh recomendó que en caso de no tener la oportunidad de escapar de un alfaque nadando, hay que mantenerse a flote pataleando; y cuando la corriente se haya disipado, nadar en diagonal y hacia la orilla.
La entidad aclaró que un alfaque no sumerge a la gente hacia el fondo, sino que la arrastra lejos de la orilla.
Algunas playas del país cuentan con señalización con banderas de color para orientar a los veraneantes de donde es seguro acercarse al mar:
Verde: baño permitido.
Amarillo: baño con precaución.
Rojo: prohibido el baño.
