La vicepresidenta Kamala Harris, ha enviado varios mensajes sobre las causas que fomentan la migración irregular desde los países del Triángulo Norte. (AP Foto/Carolyn Kaster)

La corrupción, la impunidad, la exclusión, la injusticia, la inequidad, el abandono y la falta de oportunidades son los principales obstáculos que entorpecen el desarrollo, remarcó en un comunicado la Pastoral de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal de Guatemala, previo a la visita de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.

Partiendo de su misión pastoral, conocimiento, encuentro directo y servicio a las personas en situación y riesgo de movilidad, refugio y trata de personas, la Pastoral reitera que las migraciones irregulares son producto de un sistema económico y político fallido, que no ha priorizado resolver las causas estructurales que originan esas movilizaciones.

Además, remarcan que Guatemala, como Estado soberano e independiente, tiene la obligación primaria de cumplir y hacer cumplir los derechos de los ciudadanos, hombres y mujeres, para permanecer en su país en condiciones dignas y acordes.

En su comunicado, destacan varios puntos que consideran importantes, entre ellos, que Guatemala carece de política migratoria.

“Valoramos las iniciativas de colaboración que aporten al desarrollo integral y sostenible de las comunidades en el cumplimiento de la corresponsabilidad que los Estados de la región tienen. La corrupción, la impunidad, la exclusión, la injusticia, la inequidad, el abandono y la falta de oportunidades son los principales obstáculos que entorpecen el desarrollo”, mencionaron.

DEMANDAN DE MANERA URGENTE LA CREACIÓN DE UNA POLÍTICA MIGRATORIA DE ESTADO

Asimismo, señalan que en este escenario demandan de manera urgente la creación de una política migratoria de Estado, integral, incluyente, presupuestada y con enfoque de país de origen, tránsito, destino y retomo.

A la vez, urgen que tanto los funcionarios públicos como las empresas nacionales y transnacionales cumplan con su responsabilidad de enfrentar los obstáculos señalados anteriormente.

Por último, esperan que se inicie un abordaje de esta problemática migratoria desde las causas que provocan las migraciones forzadas.

“Hacemos constar que, como Iglesia católica en coordinación con organizaciones de la sociedad civil y academia -afines a la temática- contamos con ideas y propuestas que pueden abonar a la construcción de una política migratoria integral. En ese sentido, reiteramos nuestra disponibilidad”, aseguraron.



 

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