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Por Denis Aguilar
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El Grupo Financiero de Occidente dio a conocer hoy que accionaron legalmente contra la Junta Monetaria y la Superintendencia de Bancos (SIB), luego de que en diciembre del 2019 estas instancias suspendieron sus operaciones. En diciembre, las autoridades tomaron esa decisión porque detectaron prácticas de gestión que ponían en riesgo la solvencia y la solidez de la entidad, explicaron en su oportunidad.

Hoy en conferencia de prensa, representantes de la Financiera señalan que la Junta Monetaria y la SIB, irrespetaron el derecho de defensa de la entidad, asegurando que estas instancias no resolvieron un recurso de reposición interpuesto, por lo que ahora piden a la Corte de Constitucionalidad y Corte Suprema de Justicia que se resuelva ese recurso.

El pasado 13 de diciembre del 2019, la SIB informó que con el fin de preservar la estabilidad del sistema bancario nacional, se tomó la decisión de suspender las operaciones de la Financiera, que aseguraron representaba el 0.35 del total de activos del sistema bancario.

Erick Vargas Sierra, titular de la SIB, dijo en diciembre pasado que se detectaron prácticas de gestión que ponían en riesgo la solvencia y la solidez de la Financiera.

En ese sentido, la SIB ordenó un plan de regularización, el cual se incumplió para el plazo legal de tres meses que se había otorgado a la Financiera, por lo que procedió la gestión ante la Junta Monetaria, quien decidió por unanimidad la suspensión.

Pedro Aguirre, presidente del Grupo Financiero de Occidente, dijo que la suspensión se dio sin que existiera deficiencia patrimonial o falta de liquidez e insolvencia.

*Nota modificada a las 17:13 horas para agregar un nuevo comunicado de la SIB

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