Las protestas en China contra las medidas “Covid-cero” están avivando los temores de una caída en la demanda en el mercado petrolero. Como resultado, el precio del petróleo que se distribuye en Guatemala, el West Texas Intermediate (WTI), ha descendido en las últimas semanas en un 35% desde su pico más alto en el año.
De acuerdo con DatosMacro.com, el barril de WTI se cotiza este martes en un precio promedio de US$77.1, representando una baja de US$37 si se compara con su precio máximo promedio de US$114 en junio de 2022.
La baja en el precio del crudo a nivel global se refleja como un “efecto pluma” en los precios de los combustibles nacionales, de acuerdo con el experto en comercio internacional Héctor Yumas.
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“Hoy el petróleo está en el precio que tenía cuando el galón de diésel en Guatemala estaba a Q28; por lo cual, no hay una razón para que sigamos comprándolo a Q35 como está actualmente. Sin embargo, acá existe lo denominado económicamente como ‘el efecto pluma”, enfatizó.
¿QUÉ ES EL EFECTO PLUMA?
Con “efecto pluma” el experto se refiere a que cuando el precio del petróleo cae “como una pesa”, el precio de los combustibles cae “como si fuera una pluma” en ciertos países.
“Guatemala es uno de los ejemplos claros, se da el cambio del combustible a nivel internacional y aquí se tarda dos, tres y hasta cuatro semanas en reflejarse esa baja en el mercado local”, mencionó.
De hecho, el académico puntualizó que, considerando los precios promedios de los últimos tres años, actualmente el diésel debería costar entre Q28.50 y Q29.50; la gasolina superior de Q31.70 a Q32.30.
PRECIOS ACTUALES
En las gasolineras del área metropolitana los precios se establecieron para este día así:
– Regular: Q32.99
– Superior: Q34.59
– Diésel: Q35.69
En comparación con la semana antepasada, la gasolina regular y superior bajó Q1.90 y el diésel Q2.80.
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EL COMPORTAMIENTO DEL PETRÓLEO
Según Yumas, para entender el actual comportamiento del petróleo es importante recordar que su precio se elevó drásticamente durante el año debido a tres aspectos:
1. La demanda de petróleo aumentó considerablemente en varios países.
2. La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) disminuyó su producción.
3. Rusia, uno de los grandes exportadores de petróleo del mundo, dejó de participar en el mercado internacional por las sanciones económicas tras la guerra en Ucrania.
“Esos tres factores de cierta manera, unos más que otros, habían propiciado una subida del petróleo. Sin embargo, también se dio una subida más especulativa”, recalcó.
Para el académico, el alza “especulativa” es simple de explicar: el precio de extracción de un barril de petróleo oscila habitualmente los US$47 – US$52, pero llegó a venderse por arriba de los US$100.00.
“Eso quiere decir que ellos tenían casi un 100% de ganancia sobre el costo de extracción, y ahorita lo que está sucediendo es que el mercado se está regulando”, detalló.
CHINA AFECTA EL MERCADO
De esa cuenta, Yumas explica que dicha regulación se está acelerando por el hecho de que gran parte del petróleo producido en el mundo se destina a China, pero debido a las restricciones de movilidad por la pandemia la demanda ha disminuido, provocando una mayor oferta.
Siendo el petróleo un bien sensible a los cambios de los grandes consumidores como es el caso de China, su precio se ha mostrado volátil afectando incluso la Bolsa de Valores.
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LA ESTIMACIÓN DE LOS ANALISTAS
A pesar de los efectos que las políticas chinas tienen sobre el mercado, el experto destaca que tanto él como analistas internacionales coincidieron en su momento, en que el precio del barril de WTI llegará por debajo de los US$65 durante los próximos tres meses (diciembre, enero y febrero).
Según Yumas, en una reciente conferencia donde asistió, técnicos de JP Morgan y City Internacional indicaron que el precio del petróleo podría situarse entre los US$67 – US$68 en las próximas tres semanas.
Además, estiman que para finales de diciembre el precio del WTI oscilará en un rango de US$67 a US$72 por barril.
MERMAN LOS TEMORES INFLACIONARIOS
Para el profesional, la tendencia a la baja representa que la inflación empieza a mermar, haciendo que los pronósticos inflacionarios para el 2023 sean más favorables y se disminuya el efecto especulativo.
“Ahora que el INE ya está reconociendo que efectivamente en Guatemala sí hay inflación y podría ser de hasta un 10%, pues veremos que tanto nos ayuda para el año que viene esa reducción considerable del petróleo”, destacó.
Adicional a ello, Yumas subraya que la firma de un convenio entre Estados Unidos y Venezuela, con el cual el país sudamericano podrá vender durante seis meses petróleo al país norteamericano, puede estabilizar la oferta y provocar una disminución en el precio.
Finalmente, el ejecutivo estima que el precio del petróleo se mantendrá oscilando en los US$65 durante los primeros meses de 2023, no obstante, el anuncio de la OPEP de disminuir la producción provocaría una baja en la oferta y, por consiguiente, un incremento en el precio durante los meses restantes.
