La migraña abdominal es un tipo de trastorno de dolor abdominal funcional, que afecta del 0.2% al 4.1% de los niños. Foto La Hora. Cortesía.

 

MIGRAÑA ABDOMINAL

La migraña abdominal es un tipo de trastorno de dolor abdominal funcional, que afecta del 0.2% al 4.1% de los niños. La edad media de los niños afectados es de 7 años, pero se han informado 2 picos: a los 5 y 10 años. Aunque no se comprende completamente, una posible explicación para los 2 picos es que alrededor de los 5 años, los niños ingresan a la escuela, lo que puede ser una experiencia estresante para ellos. Se ha observado que el estrés, es un factor de riesgo para la migraña abdominal.

Esta migraña consiste en ataques de dolor abdominal paroxístico, recurrente y agudo, con síntomas asociados, que incluyen palidez, náuseas, vómitos, anorexia, dolor de cabeza y fotofobia. Entre episodios, los pacientes vuelven a su estado de salud inicial. La migraña abdominal es un diagnóstico clínico. Actualmente, las migrañas abdominales son un subtipo de trastornos de dolor abdominal funcional, condiciones que se diagnostican clínicamente por su sintomatología en lugar de biomarcadores objetivos. Los trastornos de dolor abdominal funcional incluyen dispepsia funcional, síndrome del intestino irritable y dolor abdominal funcional no especificado y fotofobia.

En los niños, la migraña abdominal es una fuente de dolor abdominal crónico y repetido que interfiere con las actividades diarias y la calidad de vida en general. Es probable que la migraña abdominal esté infradiagnosticada en la población pediátrica. Suele afectar a niños de entre 3 y 12 años de edad, con una edad máxima de 5 a 7 años y es más común en niñas. Una historia familiar de migraña es muy común.

Los vómitos se notifican con más frecuencia en la MA que en la migraña típica y se presentan en casi ¾ partes de los pacientes con MA. A menudo, existe un patrón estereotipado de los síntomas y pueden ocurrir múltiples episodios en el mismo día, con una duración de hasta 3 días, simulando Síndrome del vómito (SVC). Se han informado vómitos cíclicos en esta migraña.

La MA debe considerarse en niños con Síndrome de vomito crónico (SVC) donde el dolor abdominal es un componente importante. Síntomas y signos neurológicos como fonofobia, fotofobia, trastornos visuales (hasta un 22% con aura visual), dificultad para hablar, vértigo o síntomas sensoriales en las extremidades existe con la migraña cefálica en los niños. La presencia de migraña con aura o migraña con aura del tronco encefálico pueden ocurrir juntamente con hallazgos neurológicos y deben evaluarse en niños con MA. Además, algunos niños con MA pasan a una migraña cefálica con aura.

Una característica que distingue a la MA del SVC es el síntoma predominante de dolor con vómitos menos prominentes en migraña abdominal, frente al síntoma predominante de náuseas y vómitos en SVC. La transición a una migraña más típica no es una pista de diagnóstico, ya que ocurre tanto con MA como con SVC.

La historia familiar positiva de migraña es y puede darse. Se pueden observar respuestas terapéuticas similares con el tratamiento farmacéutico en la MA y el SVC. Por ejemplo, se ha informado que el ácido valproico, el propranolol, la amitriptilina, la ciproheptadina, la flunarizina y el sumatriptán, son posiblemente efectivos tanto para la MA como para el CVS, aunque se carece de eficacia basada en la evidencia.

Hay desencadenantes que provocan ataques de migraña abdominal. Estos incluyen factores estresantes tanto en la escuela como en la vida familiar; sueño deficiente y hábitos de sueño irregulares; períodos de ayuno prolongado y privación de alimentos; deshidratación; viajar; ejercicio; alimentos ricos en aminas; alimentos con saborizantes, colorantes y glutamato monosódico (MSG) aditivos; y luces intermitentes. Los ejemplos de alimentos ricos en aminas comúnmente ingeridos, incluyen frutas cítricas, chocolate, queso, verduras como berenjenas y champiñones, y carnes como salami y jamón. Se ha informado que el sueño y el descanso son factores de alivio.

La causa de la migraña abdominal sigue sin estar clara. La hipótesis más aceptada es que los trastornos funcionales gastrointestinales, son el resultado de la hipersensibilidad visceral de las neuronas sensoriales primarias y espinales centrales. Aunque no se comprende completamente, se cree que los factores genéticos, psicosociales y ambientales pueden predisponer a un individuo a la hiperalgesia visceral.

Desencadenantes comunes de la migraña abdominal
⦁ Estrés
⦁ Privación del sueño y hábitos de sueño irregulares.
⦁ Privación de alimentos y ayuno prolongado.
⦁ Deshidratación
⦁ Viajar
⦁ Ejercicio
⦁ Alimentos ricos en aminas
⦁ Aditivos saborizantes, colorantes y glutamato monosódico en alimentos

 

Existen numerosos posibles contribuyentes a la patogenia de los trastornos gastrointestinales funcionales (TFGID), pero la causa de la migraña abdominal sigue sin estar clara. La intrincada interacción cerebro-intestino parece estar interrumpida en pacientes que tienen FGID.

Las causas en discusión

Las hipótesis más aceptadas de este mal incluyen: la hipersensibilidad visceral de las neuronas. Se cree que los factores genéticos, psicosociales y ambientales pueden predisponer a un individuo a la hiperalgesia visceral. La otra hipótesis es sobre la patogénesis de la MA es la motilidad intestinal alterada. En niños con este diagnóstico, se ha encontrado que tenían tiempos de vaciado gástrico y motilidad antral significativamente más bajos. Los factores psicológicos pueden desempeñar un papel en la fisiopatología de la migraña abdominal. Por ejemplo, los factores de riesgo para el dolor abdominal recurrente, incluyen abuso y eventos estresantes. Aunque no se entiende claramente, se ha informado que el aumento del estrés se correlaciona con una percepción visceral más sensible. El aumento del estrés induce la excitación del sistema nervioso central, lo que hace que se liberen neurotransmisores y neuropéptidos, que luego contribuyen a la desregulación del sistema gastrointestinal.

Migraña y migraña abdominal

Se ha informado una asociación entre la migraña abdominal y la migraña. La migraña abdominal se considera un equivalente de la migraña, porque constituye un síndrome paroxístico recurrente que parece tener una etiología asociada a la de la migraña. Parece haber desencadenantes, signos y síntomas, factores de alivio y tratamientos similares, así como posiblemente una patogenia similar para la migraña abdominal y la migraña. En un estudio que revisó 150 casos de migraña abdominal en niños durante un período de 10 años, el 90% de los casos tenían antecedentes familiares de migraña en un familiar de primer grado. En un estudio retrospectivo de niños en una práctica de neurología pediátrica ambulatoria que tenían migraña abdominal o síndrome de vómitos cíclicos, el 70% de los pacientes tenían migraña típica coexistente y el 65% de los pacientes informaron antecedentes familiares de migraña.

Un estudio comparando las características de la migraña abdominal y la migraña en niños menores de 15 años encuentra en el 10.6% se le diagnosticó migraña y al 4.1% se le diagnosticó migraña abdominal. Los investigadores encontraron que los precipitantes comunes en ambos grupos eran el estrés, los viajes y la fatiga, mientras que los factores de alivio comunes eran comer y descansar. Ambos grupos de niños tenían presentaciones clínicas similares y síntomas asociados, como náuseas, vómitos y palidez. Además, el 24% de los pacientes que tenían migraña abdominal tenían dolor de cabeza por migraña, en comparación con una prevalencia del 10% de dolor de cabeza por migraña en la población general. Los hallazgos anteriores pueden explicarse por la comunicación bidireccional entre las neuronas en el cerebro y el intestino.

Tratamiento

Solo unos pocos estudios pequeños han evaluado los enfoques de tratamiento para la migraña abdominal. La mayoría de los enfoques de tratamiento son anecdóticos y están adaptados de enfoques que se sabe que son beneficiosos para la migraña. Estos incluyen enfoques farmacológicos y no farmacológicos. No existen medicamentos aprobados por la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. para el tratamiento de la migraña abdominal. El enfoque del tratamiento suele estar en la prevención de los ataques, lo que a menudo implica una intervención no farmacológica. Un aspecto esencial del manejo es ofrecer tranquilidad y educar a los miembros de la familia sobre el diagnóstico. Es importante tratar de identificar los factores desencadenantes y alentar cambios de comportamiento que puedan ayudar a resolver un ataque o evitar que ocurra.

Criterios diagnósticos de migraña abdominal, dolor abdominal funcional SAI, síndrome de vómitos cíclicos y cefalea migrañosa

Alfonso Mata
Médico y cirujano, con estudios de maestría en salud publica en Harvard University y de Nutrición y metabolismo en Instituto Nacional de la Nutrición “Salvador Zubirán” México. Docente en universidad: Mesoamericana, Rafael Landívar y profesor invitado en México y Costa Rica. Asesoría en Salud y Nutrición en: Guatemala, México, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica. Investigador asociado en INCAP, Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubiran y CONRED. Autor de varios artículos y publicaciones relacionadas con el tema de salud y nutrición.
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