Por ZEN SOO y SYLVIA HUI
HONG KONG (AP) — Miles de habitantes de Hong Kong ya han tomado la decisión a veces dolorosa de dejar atrás su ciudad natal y mudarse a Gran Bretaña desde que Beijing impuso una estricta ley de seguridad nacional en el territorio chino el verano pasado. Se espera que su número aumente a cientos de miles.
Algunos se van porque temen ser castigados por apoyar las protestas a favor de la democracia ocurridas en la excolonia británica en 2019. Otros dicen que la usurpación de China en su forma de vida y libertades civiles se ha vuelto insoportable, y quieren buscar un futuro mejor para sus hijos en el extranjero. La mayoría dice que no piensa volver.
Se espera que las mudanzas se aceleren ahora que 5 millones de hongkoneses son elegibles para solicitar visas británicas, lo que les permitirá vivir, trabajar y estudiar e incluso solicitar la ciudadanía británica. Las solicitudes para la visa nacional británica extranjera se abrieron oficialmente el domingo, aunque muchos ya han llegado a suelo británico para adelantarse.
El gobierno británico dijo que unas 7.000 personas con pasaportes nacionales británicos extranjeros, un documento de viaje que los hongkoneses podían solicitar antes de que la ciudad fuera entregada al control chino en 1997, llegaron desde julio con la visa de seis meses previamente permitida. Se estima que más de 300.000 personas aceptarán la oferta de derechos de residencia extendidos en los próximos cinco años.
«Antes del anuncio de la visa nacional británica extranjera en julio, no teníamos muchas consultas sobre la inmigración del Reino Unido, tal vez menos de 10 por mes», dijo Andrew Lo, fundador de Anlex Immigration Consultants en Hong Kong. «Ahora recibimos alrededor de 10 a 15 llamadas al día preguntando al respecto».
Mike, un fotoperiodista, dijo que planea solicitar la visa y mudarse a Leeds con su esposa y su hija pequeña en abril.
Su motivación para salir de Hong Kong se produjo después de que la situación política de la ciudad se deterioró tras las protestas contra el gobierno y se dio cuenta de que la fuerza policial de la ciudad no era políticamente neutral. La policía ha sido criticada por su brutalidad y el uso de violencia excesiva.
Mike accedió a hablar con la condición de que solo se lo identificara por su nombre de pila por temor a represalias.
