Por GEIR MOULSON
MÚNICH
Agencia AP
El presidente francés, Emmanuel Macron, sugirió hoy que Europa busque mejores relaciones con Rusia a largo plazo. Dijo que, aunque no propone levantar las sanciones contra el gobierno ruso, esas medidas punitivas no han logrado persuadir a Rusia a cambiar su comportamiento.
Macron dijo durante la Conferencia de Seguridad de Múnich que un enfoque «creíble» para tratar con Rusia sería tomar la línea de que «estamos exigiendo, no estamos cediendo en nuestros principios sobre conflictos congelados, sino que volveremos a entablar un diálogo estratégico, lo que llevará tiempo».
Las relaciones entre los países de la Unión Europea y Moscú se han tensado desde que Rusia anexó la península ucraniana de Crimea en 2014 y estallaron los enfrentamientos entre el gobierno ucraniano y los separatistas respaldados por Rusia en el este de Ucrania. Ese conflicto militar ha dejado más de 14 mil muertos desde entonces. Estados Unidos y la Unión Europea impusieron sanciones a Rusia por sus acciones en Ucrania.
Las empresas francesas que comercian con Rusia han presionado a Macron para que ayude a reparar las relaciones de la UE con Moscú y para que reduzca las sanciones económicas.
Durante una visita a Polonia este mes, Macron dijo que era «un gran error distanciarnos de una parte de Europa con la que no nos sentimos cómodos».
El sábado, Macron dijo que el resultado de los últimos años es «un sistema totalmente ineficiente». Eso incluye «sanciones que no han cambiado absolutamente nada en Rusia. No propongo en absoluto levantarlas, solo afirmo esto», agregó.
Sostuvo que Rusia seguirá desempeñando un papel desestabilizador en asuntos como las campañas electorales de otros países, ya sea directa o indirectamente. «No creo en los milagros. Creo en la política, en el hecho de que la voluntad humana puede cambiar las cosas cuando nos damos los medios», afirmó.
Sin embargo, Macron argumentó que la acumulación militar de Rusia es financieramente insostenible. También opinó que una alianza rusa con China no sería «duradera», en parte porque «la hegemonía china no es compatible con el sentido de orgullo ruso». Eso, agregó, apunta a la necesidad de una «asociación europea».
