Por SYLVIE CORBET
PARÍS
Agencia (AP)
La policía de París empleó gases lacrimógenos hoy para dispersar a manifestantes antigubernamentales que trataron de revivir el movimiento de los chalecos amarillos para protestar por una supuesta injusticia económica y contra el ejecutivo del presidente Emmanuel Macron.
La capital francesa estaba bajo fuertes medidas de seguridad mientras varios cientos de contrarios al gobierno marchaban por sus calles.
Policías con equipos antimotines actuaron con rapidez para dispersar a pequeños grupos de manifestantes. Empleando gases lacrimógenos dentro y cerca de la avenida de los Campos Elíseos, en la estación de tren Saint-Lazare y en la Plaza Madeleine, zonas a las que los inconformes tenían prohibido acceder este fin de semana.
La mayoría de los asistentes a las movilizaciones no llevaban los chalecos amarillo fluorescente que dieron nombre al movimiento, que surgió hace 10 meses pero se desvaneció este verano.
La policía dijo que detuvo a al menos 39 personas e instaló 596 controles de seguridad.
Las autoridades movilizaron a más de 7.000 agentes y prohibieron las protestas en gran parte del centro, incluyendo el palacio presidencial del Elíseo, edificios del gobierno y el parlamento, los Campos Elíseos, la Torre Eiffel y la catedral de Notre Dame.
Por otra parte, activistas por el clima se manifestarán por la tarde para pedir a gobierno y empresas que tomen más medidas para reducir las emisiones y salvar la Amazonía y el Ártico.
Además, el sindicato de extrema izquierda Fuerza Obrera convocó una marcha contra la reforma de la jubilación ante la preocupación de que retrase la edad de retiro y rebaje las pensiones.
