POR BEN CURTIS/AP
Nairobi, Kenia
Las fuerzas de seguridad de Kenia abatieron a los extremistas islámicos que asaltaron un hotel de lujo y complejo comercial y se cobraron 14 “vidas inocentes”, dijo hoy el presidente del país.
«Todos los terroristas han sido eliminados”, declaró el presidente, Uhuru Kenyatta, que anunció el final de la operación para asegurar el complejo de la capital, Nairobi.
En un discurso televisado, Kenyatta no dio el número exacto de asaltantes. El Presidente apuntó que más de 700 personas fueron evacuadas durante la operación de seguridad e instó a los keniatas a “volver a trabajar sin miedo”, añadiendo que la nación del este de África es segura tanto para sus ciudadanos como para visitantes.
Horas antes del discurso de Kenyatta, pudieron escucharse disparos esporádicos desde el lugar del asalto después de que docenas de personas fueron rescatadas al amanecer en lo que la policía calificó de ejercicio de limpieza.
En el ataque participaron al menos cuatro hombres armados que invadieron el hotel y las tiendas.
Al-Shabab, el grupo extremista somalí aliado con Al Qaeda, se atribuyó la responsabilidad por la masacre en el complejo hotelero DusitD2, que incluye bares, restaurantes, oficinas y bancos y está en el vecindario de Westlands, una zona de Nairobi en la que viven muchos expatriados. La milicia radical estuvo detrás del ataque de 2013 contra el cercano centro comercial Westgate, en el que murieron 67 personas.
El Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó que entre las víctimas mortales había un estadounidense, pero no reveló su identidad.
Las autoridades enviaron a fuerzas especiales al hotel para neutralizar a los agresores. A primera hora del miércoles, el Ministerio del Interior de Kenia dijo en un tuit que todos los edificios estaban seguros y que no había más amenazas. Al amanecer se escuchó otra explosión y disparos.
