Madrid
DPA

Los trece ministros nombrados por el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, juraron hoy sus cargos ante el rey Felipe VI, en un acto simbólico tras el cual celebrarán el primer Consejo de Ministros de una legislatura que arranca tras más de diez meses de bloqueo político.

La ceremonia tuvo lugar esta mañana en el Palacio de la Zarzuela, donde hace cuatro días juró también su cargo el conservador, quien fue investido presidente por una mayoría del Congreso español el pasado sábado.

Este acto tuvo lugar casi cinco años más tarde de que juraran ante el rey Juan Carlos los trece integrantes del primer Ejecutivo de Rajoy. Cuatro de ellos repiten ahora en un gabinete continuista que solo tiene seis caras nuevas, con respecto al Gobierno del conservador al final de la pasada legislatura.

Rajoy anunció ayer, a través de un comunicado, que Soraya Sáenz de Santamaría seguirá siendo la vicepresidenta del Gobierno y que acumula más poder porque asume la cartera de Administraciones Públicas. Dejará sin embargo de ser la cara visible del gobierno ya que deja la portavocía en manos del ministro de Educación, Cultura y Deportes, Íñigo Méndez de Vigo, quien repite ministerio.

También repiten figuras clave en temas económicos como Luis de Guindos, quien recibirá una cartera más amplia, el actualizado Ministerio de Economía, Industria y Competitividad; Cristóbal Montoro en el ministerio de Hacienda y Función Pública, aunque pierde las funciones de Administraciones Públicas. Y Fátima Báñez volverá a ser la ministra de Empleo y Seguridad Social.

Otros que se mantienen son el ministro de Justicia, Rafael Catalá, y la titular de Agricultura, Isabel García-Tejerina. Mientras, entran en el Gobierno figuras relevantes del partido como la secretaria general María Dolores de Cospedal, quien ocupará la cartera de Defensa.

Entre las novedades está Juan Ignacio Zoido como ministro de Interior; Alfonso Dastis, ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación; Íñigo de la Serna, ministro de Fomento; Dolores Montserrat, ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y Álvaro Nadal, ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital.

Esta poca renovación ha sido criticada por la oposición al considerar que no representa el cambio de rumbo anunciado por Rajoy, necesario porque no tiene mayoría absoluta en el Congreso.

Si ayer el portavoz de la gestora del PSOE, Mario Jiménez, decía que «no es un Gobierno para el diálogo» por lo que habrá «serias dificultades» para generar entendimiento, hoy el encargado de hablar era el ex líder del PSOE, Pedro Sánchez.

«El cambio para Rajoy es hacer un Gobierno más reaccionario que el anterior», apuntó en un mensaje a través de la red social Twitter. Por su parte, el líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, publicó otro mensaje en el que dice que el nuevo Gobierno es «el mismo que el anterior: un Gobierno de derechas para hacer políticas de derechas».

Desde el PP, el vicesecretario de Acción Sectorial del PP, Javier Maroto, respondió a Sánchez y dijo que el nuevo Gobierno de Mariano Rajoy «no es para reaccionar, sino para cumplir».

«No es un gobierno para reaccionar, es un gobierno para cumplir los acuerdos de quienes han querido, desde la responsabilidad, ser parte de la solución como Ciudadanos y Coalición Canaria, pero también para trabar complicidades con otros grupos, como el PNV o el PSOE», dijo en una entrevista televisiva.

Está previsto que después del Consejo de Ministros, en el que no se tomarán decisiones, el nuevo portavoz del Gobierno comparezca. Rajoy todavía no ha ofrecido ninguna explicación sobre el porqué de sus nombramientos.

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