BEIRUT, Líbano
AP

Centenares de kurdos que tratan de escapar de aldeas controladas por el grupo Estado Islámico en el norte de Siria han sido blanco de ataques que han matado y herido a centenares de ellos, en medio de secuestros masivos por el grupo extremista, dijeron activistas opositores y un funcionario kurdo hoy.

Los kurdos escapaban mientras las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una milicia mayormente kurda, chocaban con el Estado Islámico en Manbij, un bastión del grupo extremista. La milicia se ha adentrado en la ciudad desde el borde sur, capturando almacenes de granos y molinos de harina, de acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, basado en Gran Bretaña.

Una familia que escapaba pisó una mina ayer, por lo que dos personas murieron y tres resultaron heridas, informó Sherfan Darwish, portavoz de las FDS, en declaraciones a The Associated Press.

Dijo que una niña de 10 años murió por disparos de francotiradores ayer. «Los civiles están desafiando la muerte para tatar de escapar de áreas controladas por Daesh», indicó Darwish, usando el acrónimo árabe para el Estado Islámico.

El éxodo comenzó luego que el Estado Islámico secuestró a unos 900 civiles kurdos en la provincia de Alepo en las últimas tres semanas, forzando a los cautivos a construir fortificaciones en respuesta a la ofensiva curda, que incluye además el bastión del Estrado Islámico en al-Bab. Otros trataban de escapar de Manjib, rodeada por combatientes de las FDS.

Algunos de los kurdos secuestrados han sido forzados a construir trincheras y albergues para el Estado Islámico, de acuerdo con el jefe del Observatorio, Rami Abdurrahman. Darwish dijo que otros son usados como escudos humanos.

Abdurrahman dijo que otros 120 kurdos han sido secuestrados desde el viernes. Los extremistas han advertido a residentes que se van que no se les permitirá regresar a sus hogares «y serán castigados si tratan de regresar», dijo.

Dijo que muchos de los que huyen se dirigen a áreas que fueron capturadas recientemente por las FDS al sur de Marea, una ciudad en poder de Estado Islámico. Abdurrahman dijo que combatientes del grupo dispararon contra quienes escapaban, matando a varios, incluso niños.

Otro grupo de activistas, los Comités de Coordinación Local, dijeron que el Estado Islámico disparó contra personas que trababan de escapar de Manjib y mató a 10, entre ellas niños.

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