Por DARLENE SUPERVILLE
EL RENO, Oklahoma, EE.UU.
AP

Observando desde el asiento posterior de su limosina negra blindada, el presidente Barack Obama ingresó ayer a una prisión federal rodeada de alambre de púas y dijo posteriormente que se reunió con reos jóvenes «que cometieron errores que no son tan diferentes de los errores que yo cometí».

Obama visitó la Institución Correccional Federal El Reno —de mediana seguridad_, ubicada cerca de Oklahoma City, para impulsar su postura de que la nación necesita reconsiderar la forma en que es controlada la delincuencia y en la que los prisioneros son rehabilitados. El mandatario se reunió con reos y caminó por pasillos de celdas vacías aseguradas por grandes puertas grises. Funcionarios de la prisión abrieron la celda número 123 para Obama y él observó sus pocos enseres: Una litera doble y una tercera cama junto a la pared, un retrete y un lavamanos, un armario par libros y tres casilleros.

«Tres hombres adultos en una celda de 9 por 10» pies (2,7 x 3 metros), dijo el presidente.

La Casa Blanca dijo que Obama fue el primer Presidente en funciones que visita una prisión federal.

El mandatario dijo que debe haber una distinción entre los jóvenes que «hacen cosas estúpidas» y los criminales violentos. La gente joven que comete errores podría ser próspera si tuviera acceso a recursos y estructuras de apoyo, dijo Obama, «eso les permitiría sobrevivir a esos errores».

«Cuando ellos describen su juventud y su niñez, estos son jóvenes que cometieron errores que no son tan diferentes a los errores que yo cometí», comentó Obama.

Entre los cambios que está buscando el presidente está la reducción o cancelación de severas sentencias mínimas obligatorias para delincuentes no violentos. A inicios de esta semana, Obama utilizó sus poderes presidenciales para reducir las sentencias de 46 personas condenadas por cargos relacionados con droga.

El presidente además pidió que se restituya el derecho a voto a delincuentes que han cumplido su sentencia, y dijo que empleadores deberían eliminar de las solicitudes de empleo el renglón que pregunta sobre sus antecedentes penales.

Obama ha expresado esperanza en que el Congreso le envíe una legislación que atienda el asunto antes de que deje el cargo en 18 meses, dado el nivel de interés en la cuestión entre legisladores republicanos y precandidatos presidenciales.

 

Artículo anteriorArpaio pide a juez demorar proceso en caso de etiquetación
Artículo siguienteDEA confía en que se volverá a capturar al «Chapo»