En los últimos días, han circulado en las redes sociales, especialmente en TikTok, videos en los cuales usuarios señalan que la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos y el estado de Texas han adoptado la política de lanzar caimanes al Río Grande, en la frontera sur con México, como una medida para contener la migración irregular.
Los videos han salido a luz mientras arrecia el discurso antimigrante, especialmente desde el gobernador de dicho Estado, Greg Abbott, y al mismo tiempo que las autoridades estatales esperan el aval judicial de la ley SB4 (bloqueada, por el momento) para tener la autorización de detener y deportar migrantes.
Sin embargo, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) negó que alguna agencia del Gobierno de EE. UU. haya puesto caimanes o cocodrilos en el Río Grande, y calificó los videos en redes sociales como “afirmaciones falsas”.
Un portavoz de la CBP detalló a La Hora que las autoridades estadounidenses están comprometidas con fomentar la migración ordenada y regular, y enfatizó en que el compromiso también es por “evitar la pérdida de vidas entre los migrantes que intentan ingresar en Estados Unidos”.
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“Debido a que las leyes de inmigración no son aplicadas, el gobernador de Texas ha tomado la macabra decisión de lanzar cocodrilos al Río Grande”, se escucha en uno de los videos, que muestra fotografías en las que se ve a soldados a la par de estos reptiles.
Además, para engañar a los usuarios de redes sociales, los creadores de estos videos suelen incluir tomas de cocodrilos o caimanes mientras están en algún río.
¿HAY CAIMANES EN EL RÍO GRANDE?
El Río Grande tiene una extensión de cerca de 3 mil kilómetros, gran parte de estos dividen a México del estado de Texas, Estados Unidos. Aunque las autoridades no están lanzando cocodrilos o cualquier otro reptil a sus aguas, es importante saber que en estas sí habitan caimanes, en especial una especie.
El sitio en internet del Departamento de Parques y Vida Silvestre de Texas (TPWD, por sus siglas en inglés) detalla que el “Alligator mississippiensis” o caimán americano es muy común en las aguas de sur de Texas.
También es común ver en varios puntos de la orilla del río rótulos donde se advierte a las personas del peligro de introducirse en el agua por los caimanes.
El «Alligator Mississippiensis» estaba al borde de la extinción en la década de 1960, dice el sitio en internet del TPWD, pero “ha experimentado un tremendo resurgimiento en los últimos 30 años”, a raíz de que en 1969 el estado proporcionó protección completa la especie y la clasificó como en peligro en 1973, estatus que se le retiró en 1985.
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Además, el TPWD enfatizó en que con la llegada de la primavera los caimanes salen de su etapa de brumación, una especia de hibernación de los reptiles cuando la temperatura de las aguas baja, por lo cual es más común verlos en el agua.
“Del 1 de marzo al 30 de mayo es la época de mayor reproducción y anidamiento. Durante la época de cría, las hembras permanecen cerca de sus territorios de origen, mientras que los machos pueden ocupar áreas de hasta diez millas cuadradas”, detalló la agencia estatal.
El caimán americano es carnívoro y come cualquier cosa que pueda capturar, incluidos peces, tortugas, lagartos, serpientes, pequeños mamíferos, aves acuáticas, crustáceos y otros caimanes.
El sitio dice que estos reptiles normalmente evitan a los humanos, pero pueden ser vistos como “una molestia” cuando se asientan alrededor de las personas y que “pueden ser sorprendentemente rápidos en tierra”.
En ese sentido, el TPWD detalló que podrían atacar mascotas y que, por lo tanto, “deben ser tratados con precaución”.
MIGRACIÓN
La frontera sur de Estados Unidos comenzó a experimentar episodios de crisis debido a la gran cantidad de personas que están llegando de manera irregular.
Organizaciones no gubernamentales denunciaron el pasado lunes 1 de abril que grupos de migrantes, incluidos niños, se encuentran en albergues improvisados a la intemperie.
Solo en los primeros cinco meses del actual año fiscal en EE. UU., de octubre de 2023 a febrero pasado, 1.48 millones de migrantes han sido interceptados en la frontera sur.
El tema migratorio también cobra relevancia este año por las elecciones de noviembre próximo, ya que el suele ser utilizado con fines políticos tanto por demócratas como por republicanos.
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