Las autoridades electorales de Rusia anunciaron el lunes que las elecciones presidenciales del próximo año se celebrarán también en cuatro regiones ucranianas parcialmente ocupadas que Moscú se anexó ilegalmente en 2022 tras su invasión.
La Comisión Electoral Central rusa adoptó el decreto para proceder con las votaciones en las partes controladas por Rusia de las regiones ucranianas de Donestsk, Luhansk, Jersón y Zaporiyia. También se celebrarán las elecciones en la península de Crimea, que Rusia se anexó ilegalmente de Ucrania en 2014.
El jueves pasado, los legisladores rusos fijaron el 17 de marzo de 2024 como la fecha para la celebración de las próximas elecciones presidenciales. Al día siguiente, el presidente Vladímir Putin anunció su candidatura, y es casi seguro que obtenga otro mandato de seis años.
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La directora de la Comisión Electoral Central, Ella Pamfilova, dijo la semana pasada que la comisión tomaría una decisión por separado sobre si realizaría las elecciones en las cuatro regiones ucranianas parcialmente controladas debido a que hay una ley marcial en vigor en dichas zonas. Hace unos meses, los legisladores rusos modificaron las regulaciones para permitir que se celebren elecciones en territorios donde haya una ley marcial vigente.
Las autoridades rusas celebraron elecciones en las regiones anexadas en septiembre para los Congresos instalados por Moscú. Ucrania y sus aliados de Occidente aseveraron que habían sido una farsa.
Ucrania ha condenado la intención rusa de organizar elecciones presidenciales en territorio ocupado. Su Ministerio de Asuntos Exteriores señaló que ese tipo de votaciones en las regiones ocupadas sería “nulo e inválido” y dijo que cualquier observador internacional enviado a supervisar las elecciones rusas enfrentaría “responsabilidades penales«.
El ministerio ucraniano pidió a la comunidad internacional que condene las intenciones de Rusia e imponga sanciones a aquellos involucrados.
