Varias regiones de Ucrania, incluida su capital, enfrentaban a primera hora del jueves un ataque ruso con misiles, el último de una serie dirigido contra la infraestructura nacional. Las sirenas de ataque aéreo se activaron en todo el país. Mykhailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, dijo que Rusia lanzó más de 120 misiles.
En Kiev, los sistemas de defensa aérea se activaron para repeler el ataque con misiles en curso, de acuerdo con el gobierno regional. Se podían escuchar sonidos de explosiones en la ciudad. El alcalde de Járkiv, Ihor Terekhov, dijo que se registraron varias explosiones en la segunda ciudad más poblada de Ucrania. También se escucharon explosiones en la ciudad de Leópolis cerca de la frontera de Polonia, de acuerdo con el alcalde Andriy Sadovyi.
Las autoridades ucranianas de varias regiones dijeron que algunos misiles rusos fueron interceptados. El gobernador de la provincia de Mykolaiv, en el sur de Ucrania, Vitaliy Kim, dijo que cinco misiles fueron derribados sobre el mar Negro. El mando militar ucraniano del Norte declaró que dos de ellos fueron derribados sobre la región de Sumy, situada en la frontera con Rusia, en el noreste del país.
Fragmentos de misiles rusos derribados dañaron dos edificios privados en el distrito de Darnytskyi de Kiev, según el gobierno municipal. También sufrieron daños una instalación industrial y un parque infantil en los barrios situados al otro lado del río Dniéper, según las autoridades municipales. No se informó inmediatamente de víctimas.
El ataque generalizado fue el más reciente que tiene como objetivo infraestructura crucial de Ucrania. Moscú ha lanzado este tipo de ataques semanalmente desde octubre, causando apagones e interrupciones en el suministro de agua. El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, advirtió el jueves que podría haber apagones en la capital, y pidió a la gente que almacenara agua y cargara sus dispositivos electrónicos.
Después de los ataques anteriores, el ejército ucraniano informó de que había derribado los misiles rusos y los drones explosivos que se aproximaban, pero algunos siguieron alcanzando sus objetivos, aumentando el sufrimiento de la población en medio de temperaturas bajo cero. Cuando comenzó la última oleada de ataques rusos el jueves, las autoridades de las regiones de Dnipro, Odesa y Kryvyi Rih dijeron que habían cortado la electricidad para minimizar los daños a las infraestructuras críticas en caso de que fueran alcanzadas.
Ucrania denuncia una nueva oleada de ataques rusos con "más de cien misiles" y drones https://t.co/5WOhQQrR43 pic.twitter.com/u4uMoGambY
— Europa Press TV (@europapress_tv) December 29, 2022
A principios de mes, Estados Unidos acordó entregar a Ucrania una batería de misiles Patriot para reforzar la defensa del país. Estados Unidos y otros aliados también se comprometieron a proporcionar equipos relacionados con la energía para ayudar a Ucrania a resistir los ataques contra su infraestructura. Podolyak, asesor de Zelenskyy, dijo que Rusia pretendía «destruir infraestructuras críticas y matar a civiles en masa».