Los máximos responsables de la Unión Europea prometieron hoy utilizar todas las medidas disponibles para garantizar que Gran Bretaña respeta los términos del acuerdo del Brexit con el bloque mientras crecen las tensiones por la relación comercial con Irlanda del Norte.
«Es primordial implementar lo que hemos decidido. Esta es una cuestión de Estado de derecho», afirmó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. «Utilizaremos todas las herramientas que tenemos para asegurarnos de que defendemos nuestros intereses y protegemos la integridad del mercado único».
En un intento por aliviar las tensiones, Michel y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reunirán con el primer ministro británico, Boris Johnson, en un aparte de la cumbre del G7 que se celebrará en Inglaterra.
La disputa se centra en las disposiciones del acuerdo del Brexit que esencialmente crearon una frontera regulatoria entre Irlanda del Norte y el resto de Gran Bretaña. Esto enojó a muchos residentes probritánicos que rechazan todo lo que amenace su estatus como parte del país.
El Protocolo de Irlanda del Norte fue diseñado para mantener la paz en el territorio asegurando que el comercio con la República de Irlanda, miembro de la UE, sigue fluyendo libremente luego del divorcio entre Londres y Bruselas. El protocolo exige que las autoridades británicas realicen controles a ciertos productos enviados allí desde otras partes de Gran Bretaña.
A principios de año, Gran Bretaña demoró de forma unilateral estas inspecciones, alegando que necesitaba más tiempo para establecer el sistema correcto. La UE amenazó con tomar acciones legales por lo que considera un incumplimiento de las obligaciones internacionales del país. Ahora, el gobierno británico está considerando más retrasos.
Von der Leyen dijo a reporteros que Bruselas ha «mostrado flexibilidad, mostraremos flexibilidad, pero el protocolo y el Acuerdo de Retirada (del Brexit) tiene que implementarse completamente».
La UE está «decidida a hacer todo lo posible para mantener la paz y la estabilidad en la isla de Irlanda. Es importante que haya un profundo respeto por el protocolo, que lo protejamos», añadió.
Von der Leyen afirmó que el bloque no dudará a la hora de utilizar las soluciones contempladas en el pacto del Brexit, incluyendo derivar la disputa a un comité de arbitraje, lo que podría acabar en sanciones económicas para Gran Bretaña, o sancionar con aranceles las importaciones procedentes del país.
