En la foto, el presidente Alejandro Giammattei, Miguel Martínez, exjefe del extinto Centro de Gobierno, Consuelo Porras, fiscal general del MP, Ángel Pineda, secretario general del MP y Rafael Curruchiche, jefe de la FECI.
En la foto, el presidente Alejandro Giammattei, Miguel Martínez, exjefe del extinto Centro de Gobierno, Consuelo Porras, fiscal general del MP, Ángel Pineda, secretario general del MP y Rafael Curruchiche, jefe de la FECI. Foto: Roberto Altán/La Hora

Este día el Consejo de la Unión Europea hizo formalmente el anuncio de sanciones contra los actores del plan contra la democracia en el país que no solo se refieren a permisos de viaje, sino también a la congelación de activos de las personas que forman parte de ese plan macabro. Así como de sus sociedades, prohibiendo a entidades europeas facilitarles de alguna manera el acceso a esos recursos.

Se trata de una sanción muy similar a la contemplada en la Ley Magnitsky de los Estados Unidos, aplicada ya a Miguel Martínez luego de las primeras acciones contra el resultado electoral en el que el electorado eligió a Bernardo Arévalo. La Unión Europea acreditó y mantuvo en Guatemala a observadores que dieron fe de la transparencia del proceso electoral y la legitimidad del resultado, lo que sirve de fundamento para la implementación de estas nuevas medidas.

Eso explica perfectamente la actitud de Alejandro Giammattei en su viaje a Estados Unidos, porque él pretende librarse de las sanciones reafirmando que no tiene nada que ver con lo que hacen desde el Ministerio Público sus leales operadores que tienen el encargo de bajarse el proceso electoral y romper el orden constitucional en el país. Es evidente que él pretende endosar toda la responsabilidad a Consuelo Porras, Ángel Pineda, Rafael Curruchiche y compañía, incluyendo los jueces apalabrados, queriendo aparentar que no tiene nada que ver con lo que ellos están haciendo.

Pero ni en Estados Unidos ni en Europa se tragan tamaña píldora y todos saben que, tal y como lo reflejó con toda claridad el audio que los encargados de encubrir el cáncer de Giammattei también negaron, atribuyéndolo a la Inteligencia Artificial, en el que Miguel Martínez le ordenaba al Presidente de la República que pusiera en orden a la “vieja …” y al “indio …” para que actuaran contra el TSE y las elecciones. 

Por supuesto que esta decisión de la Unión Europea no va a detener el macabro plan porque están metidos hasta el cuello en el mismo, pero si fortalece la posición de la ciudadanía guatemalteca y da la confianza de que de alguna manera los perversos van a tener que rendir cuentas y serán despojados del dinero que han lavado en otros países. Es un espaldarazo para la sociedad que vive horas difíciles por el empecinamiento para traerse abajo el orden constitucional con un Golpe de Estado que se materializa en los tribunales.

La sociedad de Guatemala no está sola en estas horas críticas y el respaldo de la comunidad internacional alienta la esperanza del inicio de una transformación de nuestro sistema político.

 

Artículo anteriorAlemania: Tesla detiene producción por problemas con suministros
Artículo siguiente¿Con quiénes cuentan Giammattei, Martínez, Rodríguez y Alejos para la presidencia del Congreso?