En la madrugada de hoy el Juez Víctor Cruz ligó a proceso a los detenidos por el caso de la Universidad de San Carlos únicamente por dos delitos, usurpación y depredación del patrimonio cultural, señalando falta de mérito para los crímenes de sedición y asociación para delinquir que eran el meollo de la acción de la fiscalía para concretar la persecución de varios políticos, entre ellos el Presidente y la Vicepresidenta electos. El caso le fue encomendado al juez Cruz, como se ha hecho con otros juzgadores afines o apalabrados, pero en esta ocasión fue tan burda y pobre la acusación que no le quedó otro remedio que dictar arresto domiciliario a los sindicados, rechazando así las objeciones del MP y de representantes de la Usac, quienes se opusieron a que se les pudiera otorgar “cualquier medida sustitutiva”.

Vale la pena recordar que dentro de la carpeta bautizada como “Caso Usac: Botín Político”, se mencionó tanto a Arévalo como a Herrera para antejuiciarlos y de esa manera armarles un proceso para impedir que tomen posesión de sus cargos, situación que se ve seriamente debilitada por la resolución del Juez Cruz. Y es que fue tan pobre la argumentación y tan burda la ausencia de pruebas para sindicarlos por sedición y asociación para delinquir que no le quedó otro remedio que emitir una resolución que es un tremendo revés para los planes de quienes se han propuesto acosar a la democracia.

Por supuesto que esto no significa, de ninguna manera, que termine ya el acoso para invalidar el resultado electoral y veremos muchas otras acciones y casos porque es claro el interés por armar, a como dé lugar, un pastel para dejar sin efecto la voluntad soberana del pueblo expresada, libremente, en las urnas.

Y fue un día de reveses para los que han montado todo este proceso antidemocrático, porque en la comisión pesquisidora contra los magistrados del Tribunal Supremo Electoral, mientras el denunciante Giovanni Fratti decía que únicamente hablaban de un fraude al erario público por la compra del programa de transmisión de datos, su acompañante, Karen Fischer, soltó la sopa urgiendo a la comisión a acelerar el paso porque ya falta muy poco para que el 14 de enero tomen posición los electos. Fischer dejó claro el real interés que hay detrás de todas las acciones legales que se vienen realizando.

El problema, sin embargo, es que a los que conspiran contra el Estado de Derecho y la legalidad en el país no se avergüenzan de sus fracasos y seguirán haciendo distinto tipo de maniobras para lograr su objetivo, aunque quede claro a los guatemaltecos y a la comunidad internacional, el juego que se viene ejecutando.

Redacción La Hora

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