Los inmigrantes residentes en Carolina del Norte, Estados Unidos, está en vilo y pendiente de la firma de los dos proyectos de leyes antiinmigrantes que han sido aprobados por los representantes republicanos de dicho estado, cuyo objetivo es promover las deportaciones masivas en dicho estado, siguiendo los lineamientos de la administración de Donald Trump y que se encuentran pendientes de aprobar por parte del gobernador.
Los proyectos SB 153 y HB 318, ambos proyectos con distintos matices, buscan el fortalecer esencialmente la cooperación de agencias del orden con ICE para poder fortalecer los operativos de persecución de inmigrantes ilegales residentes en Carolina del Norte. Debo enfatizar que aún no se ha convertido en ley al estar pendiente de firma por parte del gobernador John Stein de dicho estado, pero por la situación imperante en Estados Unidos, que atraviesan días cruciales, que puedan definir el destino de ambas leyes y por lo tanto de la comunidad inmigrante de cualquier nacionalidad, que contribuyen con el desarrollo de la economía estatal en áreas como la construcción, agricultura, hostelería, servicios entre otros.
Es de recalcar que el viernes pasado, Josh Stein, gobernador de Carolina del Norte, vetó ambos proyectos, aprobados por la Asamblea General estatal, siendo la única alternativa para evitar que los mismos se convirtieran en leyes vigentes.
Dicho veto por parte del gobernador ha sido un alivio ante la angustiante situación que viven los inmigrantes ilegales, resaltando que los miembros de la comunidad latina, especialmente mexicana residente en Carolina del Norte, realizó un fuerte trabajo de organización para presionar que el gobernador vetara ambas leyes
LA INQUIETUD DE SI EL VETO A PROYECTOS, NO PODRÁN CONVERTIRSE EN LEYES ESTATALES
La respuesta es NO, los miembros de la Asamblea General, tienen dentro de sus facultades la potestad de realizar la anulación del veto del gobernador, en el caso que los representantes republicanos puedan obtener una mayoría del 60% de los votos de ambas cámaras, podrían concretar que ambos proyectos se pudieran convertir en leyes.
Actualmente se desconoce qué pasará con ambos proyectos, ya que se encuentran en situaciones muy diferentes y uno de ellos tiene la posibilidad mayor de convertirse en ley.
Justamente en la presente semana, es posible que el HB 318 sea tratada en la Cámara de Representantes para anular el veto, analizando según la composición actual, los republicanos necesitan al menos un voto demócrata en la Cámara, si todos los legisladores están presentes, para anular el veto.
Se destaca que el problema es que la representante demócrata Carla Cunningham emitió su votó a favor de esta iniciativa, en el caso de que Cunningham mantuviera su postura, es muy probable que la Cámara anule el veto emitido por parte del gobernador Stein.
Es de señalar que en el Senado estatal, los miembros republicanos tienen los votos suficientes para lograrlo sin apoyo demócrata, es por ello que el punto de inflexión está en la cámara de representantes estatales.
Al leer el contenido de la HB 318, en la misma se propone el ampliar los delitos por los cuales los alguaciles deben realizar las colaboraciones pertinentes con los agentes de ICE.
Entre los delitos se incluye, el conducir bajo la influencia del alcohol, es decir, una persona podría ser puesta en proceso de deportación inmediata por haber tomado en exceso.
EN EL CASO DE LA SB 153
En el caso de la iniciativa SB 153, la misma obliga a que varias agencias estatales suscriban acuerdos amparados bajo la 287 (g) para colaborar con la agencia ICE y otras que le apoyen.
En caso de convertirse en ley la SB 153, el Departamento de Seguridad Pública, la Patrulla de Carreteras, el Departamento de Correccionales y el Buró de Investigaciones, estarán obligados a brindar la colaboración necesaria a los agentes migratorios en la persecución a inmigrantes ilegales residentes en Carolina del Norte.
También se contempla el imponer la elaboración de auditorías para controlar que los inmigrantes indocumentados residentes en dicho estado, no reciban beneficios estatales y a la vez permitir el exigir a gobiernos locales el implementar políticas santuario, que de todas formas ya están prohibidas por ley y no existen en Carolina del Norte.
Se resalta que en el caso de los representantes demócratas, la iniciativa no contó con el apoyo, por lo que es más complicado que los representantes republicanos puedan revertir el veto del gobernador en la Cámara de Representantes estatales.
Los miembros de la Asamblea General de Carolina del Norte tomarán un receso retornando hasta el mes de septiembre, por lo que en la presente semana o la siguiente se dará si son revertidos los vetos. En el caso que no fueran revertidos los vetos dentro de los 10 días posteriores a la negativa del gobernador, ya no podrán ser revertidos a futuro.
Es de destacar que los gobiernos de Guatemala, Honduras, El Salvador, México, Ecuador entre otros, deberían realizar campañas informativas en medios escritos, radiales y televisivos en sus países de origen para poder orientar a familiares de inmigrantes y éstos trasladar la información, como parte de una responsabilidad moral de los gobernantes en mantener informados a sus comunidades, no hacerlo, muestran la falta de interés de las cancillerías y de las entidades vinculadas al tema migratorio de generar dichas campañas.
En el caso de los miembros de la Comisión de Migrantes del Congreso de la República de Guatemala, entre otras, deberían exigir a los funcionarios vinculados a la temática migratoria, el presentar acciones de orientación a inmigrantes residentes en Estados Unidos como es la implementación de nuevas leyes, que a la fecha no se promueve o citar a funcionarios para exigir presentar planes de acción en favor de la comunidad inmigrante que sostiene la economía del país y a más de 6.5 millones de familiares en Guatemala, con el envío de remesas, se debe ser más diligente en los puestos.
