El presidente de Argentina, Javier Milei, habló este viernes por primera vez sobre las primeras medidas de un plan de austeridad «súper ortodoxo» que su gobierno presentó esta semana y cuya «máxima prioridad» es «terminar con la inflación«.
Milei, ultraliberal de 53 años que asumió el poder el domingo, hizo una transmisión en vivo en redes sociales para presentar desde el despacho presidencial un sorteo para entregar su último sueldo como parlamentario, como hizo durante los dos años que ejerció el cargo.
«Estamos totalmente abocados en terminar con la inflación, terminar la híper. De ahí que hicimos un programa súper ortodoxo para terminar con el déficit fiscal y llevar el déficit financiero a cero«, dijo el mandatario.
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El plan de austeridad incluyó una devaluación de 50% del peso argentino y tiene previsto una estricta reducción del gasto, con la eliminación de subsidios al transporte y la energía, con el objetivo de sacar al país del déficit fiscal.
«Mi máxima prioridad es terminar con la hiperinflación, hoy la inflación en Argentina viaja al 1% diario, eso quiere decir que la inflación está viajando a 3.678 anual«, dijo Milei con relación a su propia proyección inflacionaria anual, que a noviembre de 2023 se ubica en el 160,9% interanual.
«Estamos haciendo un esfuerzo enorme«, remarcó el mandatario, asegurando que medidas tributarias impuestas al sector privado serían «transitorias«.
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«Una vez que acomodemos la economía, vamos a empezar a terminar con todas esas cosas que a los libertarios no nos gustan«, dijo en referencia a la suba por ejemplo, del impuesto a la exportación y la propuesta de retomar un tributo a las ganancias.
Milei, que durante la campaña blandía una motosierra para simbolizar su idea de recortes, redujo el tamaño del Estado y puso un alto a la obra pública.
La transmisión por Instagram fue sintonizada por más de 100.000 usuarios. Entre los presentes en el palacio presidencial Casa Rosada estaba su hermana y secretaria de presidencia, Karina Milei, junto a otros miembros de su equipo y un escribano público que supervisó el sorteo.
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