Bueno, allí estamos con dos opciones a la presidencia y vicepresidencia, dos formas de ver el desarrollo de Guatemala, debemos ser cautos en este sentido para salir masivamente a votar este domingo 20 de agosto 2023 para demostrar que los guatemaltecos sabemos decir presente con nuestra participación cívica y ciudadana practicando lo único que tenemos de democracia en ejercer el sufragio mediante el voto popular.
Esta participación debe ser numerosa para darle legitimidad al ganador, buscando la mejor opción para decirles que la población ya no quiere corrupción, impunidad, violencia, falacias, etc.; lo único que quiere es compromiso de cambiar el país porque estoy seguro que el hartazgo ha llegado a sus límites y estos cuatro años serán el inicio de un cambio social donde la gente saldrá a las calles a aplaudir las buenas acciones o desmanes del ganador.
Esta sociedad guatemalteca ya no aguanta más, exige una clase política comprometida con las grandes mayorías y que de igualdad y equidad, no quiere más funcionarios públicos del ejecutivo, legislativo y judicial corruptos que se presten en hacer negocios con empresarios sin escrúpulos y lo peor hacer alianzas con el crimen organizado valiéndose de su posición para terminar siendo millonarios con los recursos del pueblo de Guatemala.
Este 20 de agosto no se dará un cheque en blanco al ganador, los guatemaltecos estarán vigilantes del accionar de los postulados a dirigir los destinos del país, valiéndose de sus derechos de exigir transparencia e información sobre la forma de hacer y administrar los recursos del estado.
Hoy le enviamos un mensaje a los funcionarios electos y reelectos a que se pongan a cuentas con Dios y hagan un compromiso con ustedes mismos a ser fieles servidores públicos en no meterse en actos de corrupción por salud y bienestar de ustedes mismos, su familia y por nosotros como sociedad porque los vamos a denunciar públicamente y esa fama de ladrones será de por vida. Los corruptos se agarran una fama que arrastra a la familia, es difícil conversar con empleados que uno sabe que son vulgares ladrones y a veces por necesidades de gestión uno se tiene que morder la legua y aguantarse para estar en reuniones con gente desalmada y sin ninguna clase de principios porque se convierten en millonarios sin haber hecho algo productivo en la vida.
Muchos de los funcionarios que gracias a Dios no se reeligieron solo es de desearles que les duren esos recursos robados sin descaro porque no tendrán paz interna, saben muy bien que los recordaremos como vulgares mercenarios, rateros, descarados y burdos aprovechados. Cada funcionario saliente catalogado como corrupto sabe que estas líneas van para él y porque no decirlo para aquellos reelectos y electos que siguen con las mismas mañas, que pretendan hacer lo mismo les damos un alerta para que piensen en meterse algo al bolsillo que no les pertenezca, porque si así lo hicieren, siempre los vamos a catalogar como unos “Hijos de Yegua”, aunque se enojen las Yeguas que no tendríamos porqué mencionarlas en este espacio.
Y para aquellos políticos viejos que ya no figuran en la esfera electoral y que ahora están sacando su dinero por medio de sus testaferros y familiares, invirtiendo en negocios y bienes inmuebles, les recordamos que esas acciones les traerán más desgracia y no tendrán tranquilidad, su conciencia los hará despertarse de noche y no conciliar el sueño.
