Eduardo Pérez, también conocido como Héctor Yovanny Carpio Avalo y “Scoody” y quien supuestamente forma parte de los líderes de la Mara Salvatrucha fue capturado por Policía Nacional Civil (PNC) el pasado miércoles 7 de diciembre en un centro asistencial del departamento de Santa Rosa y por lo cual, fue entregado este jueves a autoridades de El Salvador, según el vocero del Ministerio de Gobernación, Jorge Aguilar.
La cartera de interior aseguró que alias “Scoody”, es requerido en El Salvador, debido a que cuenta con una orden de captura en su contra por la presunta comisión del delito de homicidio en el país vecino.
Se trata de Eduardo Pérez y/o Héctor Yovanny Carpio Avalo, alias Scoody, prófugo de la justicia salvadoreña que tiene orden de captura por homicidio. pic.twitter.com/EYAF27kI28
— PNC de Guatemala (@PNCdeGuatemala) December 7, 2022
Agregó que se supuestamente se trata de un “peligroso” pandillero de origen salvadoreño, quien pertenece a la Mara Salvatrucha y se encontraba prófugo desde 2009.
Según autoridades salvadoreñas el sindicado se cree pertenece a una estructura de 15 líderes de la MS-13, de los cuales 10 han sido capturados, incluyendo a Pérez.
Destacó que “Scoody” es señalado de múltiples homicidios, extorsiones, así como otro tipo de delitos en el país centroamericano, y desde el referido año era buscado por homicidio agravado, así como el delito de “agrupaciones ilícitas”, en el régimen de excepción bajo el cual se encuentra El Salvador.
ES EXPULSADO
De la misma forma, Gobernación realizó la expulsión del presunto pandillero bajo fuertes medidas de seguridad por el Centro de Antipandillas Transnacional (CAT) y las Fuerzas Especiales (FEP) de la PNC con el fin de ser entregado a las autoridades salvadoreñas en la aduana Valle Nuevo.
86 PANDILLEROS CAPTURADOS
Unos 86 integrantes tanto del Barrio 18, así como de la Mara Salvatrucha que son buscados por El Salvador han sido expulsados del territorio guatemalteco, de acuerdo a Aguilar.
Las autoridades salvadoreñas indicaron que el presunto delincuente quedará en detención será juzgado en su país, con una probable condena de 30 a 35 años.