Sergio Penagos Dardón

Ingeniero Químico USAC, docente, investigador y asesor pedagógico en el nivel universitario. Estudios de posgrado en Diseño y Evaluación de Proyectos y Educación con Orientación en Medio Ambiente; en la USAC. Liderazgo y Gestión Pública en la Escuela de Gobierno.

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Sergio Penagos

Progre, término peyorativo con que los ignorantes y prepotentes pseudo políticos denominan a las personas que les obstaculizan el ascenso, o la permanencia en el poder. En su monumental ignorancia los ubican al servicio del comunismo internacional, los llaman rojos, chairos, comunistoides y una larga lista de epítetos fantasiosos.

Un poco de historia les vendría bien a estos altaneros ignorantes. La llamada Era Progresista, fue un período de activismo social generalizado y de reforma política en los Estados Unidos, desde la década de 1890 hasta la década de 1920. Los principales objetivos de este movimiento progresista eran, eliminar los problemas causados por la industrialización, los problemas de la urbanización, la inmigración y la corrupción política. El movimiento identificó como el mayor de los males a la estructura de los partidos políticos y sus dirigentes, y buscaron formas de impedir que accedieran al poder en forma fraudulenta proponiendo procesos democráticos transparentes. El movimiento apuntó principalmente a la maquinaria política de los partidos y a sus jefes, con el propósito de impedir que estos políticos corruptos ocuparan cargos públicos.

En sus orígenes el movimiento operaba principalmente a nivel local, pero luego se expandió a los niveles estatales y nacionales. Los progresistas obtuvieron el apoyo de la clase media, después se incorporaron abogados, maestros, médicos, ministros religiosos y empresarios independientes.

Perturbados por el desperdicio, la ineficiencia, la terquedad, la corrupción y las injusticias, al final de la edad dorada americana, los progresistas se comprometieron a reformar todos los aspectos del estado, la sociedad y la economía. Los cambios significativos fueron impulsados a nivel nacional incluyendo la imposición del impuesto sobre la renta, la elección directa de los Senadores y las reformas electorales para detener la corrupción y el fraude. El presidente Roosevelt buscó frenar la influencia de las grandes empresas en la política, lo que le valió el nombre de republicano progresista. Este movimiento simpatizaba con los métodos científicos aplicados a la economía, al gobierno, la industria, las finanzas, la medicina, la educación, la teología, la educación e incluso a la familia. Siguiendo los avances que se desarrollaban en Europa Occidental, adoptaron políticas novedosas, entre ellas una adecuada transformación del sistema bancario, para lo cual se creó el Sistema de la Reserva Federal en 1913; además las cooperativas de crédito, con la fundación de la primera de ellas en 1908. Los progresistas estaban conscientes que las formas anticuadas de hacer las cosas respondían a la ineficiencia y el desperdicio de recursos. El sistema político fue objeto de modificaciones novedosas para mejorarlo.

El objetivo principal del movimiento progresista apuntaba a eliminar la corrupción dentro del gobierno. Esperando lograrlo promovieron formas legales para que los ciudadanos pudieran participar en política, de manera más directa eludiendo las trampas de los partidos, y promoviendo la posibilidad de destituir a los representantes públicos corruptos o inútiles. De esa forma, la elección primaria directa permitió a las personas nominar candidatos de manera democrática, evitando las convenciones manipuladas por políticos profesionales. Una enmienda en 1908 otorgó a los votantes el poder para revocar a los funcionarios electos corruptos e incompetentes. Establecieron a nivel estatal la elección popular de los Senadores, y las primeras elecciones primarias para los candidatos presidenciales.

Los progresistas eran ávidos modernizadores, con una firme creencia en la tecnología y la ciencia como la gran solución para corregir los fallos de la sociedad. Con la publicación de revistas y periódicos, el periodismo de investigación puso en evidencia los turbios manejos de los monopolios corporativos y de la maquinaria de los partidos políticos, informando a la ciudadanía y posibilitando el desarrollo de una conciencia crítica. La mayoría de los columnistas y periodistas investigaban hechos reales, cuyos relatos tenían un gran impacto en sus lectores. Los periodistas se especializaron en exponer el despilfarro, la corrupción y el escándalo a nivel local y estatal, exponiendo la corrupción política en muchas grandes ciudades. En 1906, el periodista David Graham Phillips, con sus revelaciones desencadenó una verdadera tormenta al destapar actos de corrupción en el Senado de los Estados Unidos. El presidente Roosevelt los llamó muckrakers, (escarbadores) y lo instó a escarbar en todo el país.

Estos muckrakers, con la publicación de los resultados de sus investigaciones provocaron un gran impacto en todos los ámbitos de la sociedad estadounidense, al sacar a luz la corrupción política y económica, los abusos empresariales, la falta de vivienda, las infrahumanas condiciones laborales de obreros e inmigrantes, la manipulación de los alimentos, la situación compleja de las cárceles, entre otras lacras sociales ¿Estos progres norteamericanos eran comunistas?

En los finales del siglo 20 e inicios del siglo 21, en América Latina, los Evos, Chávez, Correas, Fernández, Maduros, Sandra y otros, con apoyo de corruptos foráneos, embaucaron al electorado ofreciendo acabar con la época neoliberal, luego retorcieron la ley para perpetuarse en el poder. Esos gobiernos nunca fueron progres, sólo mentirosos y corruptos.

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