El Fondo Monetario Internacional (FMI) determinó en su reciente visita a Guatemala que la economía nacional “repuntó con fuerza” durante el 2021, al lograr un crecimiento estimado del Producto Interno Bruto (PIB) real en torno al 8%, cifra que concuerda con el 7.5% reportado por el Banco de Guatemala (Banguat) semanas atrás.
Pese a tal logro, personal técnico del FMI prevé que al cierre de este año, que el país retome la tendencia de crecimiento previa a la pandemia, un crecimiento más moderado en torno al 4%.
Sin embargo, la entidad aseguró con base en lo observado durante su visita el pasado 28 de marzo, a pesar del “vigoroso ímpetu económico en medio de significativas necesidades de desarrollo y riesgos elevados”, es probable que los indicadores sociales, como ha sucedido en otros países, hayan empeorado durante la pandemia.
Con base en los resultados, el FMI detalla en 6 puntos las acciones que el Estado y el Gobierno deben implementar para un crecimiento integral y sostener así el ímpetu económico:
1. CALIBRAR CON CUIDADO LAS POLÍTICAS A CORTO PLAZO
De acuerdo con el FMI, será necesario que las autoridades calibren con cuidado las políticas a corto plazo para sostener el ímpetu económico y, a la vez mantener la agilidad frente a la evolución de las condiciones sociales y macroeconómicas.
Sobre esto, destacan los siguientes puntos:
– LA NORMALIZACIÓN DE LA POLÍTICA MONETARIA
Debe ser cuidadosamente medida en medio del endurecimiento de las condiciones financieras mundiales, y guiada por datos para mantener ancladas las expectativas inflacionarias.
“Una estrategia de comunicaciones clara y congruente ayudará a guiar las expectativas del mercado. La flexibilización del tipo de cambio también puede ayudar a absorber los choques externos”, puntualizó el informe.
– LA ORIENTACIÓN FISCAL
El FMI indicó que la orientación fiscal enmarcada en el presupuesto aprobado para 2022 es adecuada, pero recalca que las iniciativas anunciadas para mitigar el aumento de las importaciones recurriendo al espacio fiscal creado en 2021, incluidos subsidios al gas, a derivados del petróleo, a los pequeños agricultores y a la electricidad son “provisionales” y deberán mantenerse de forma “focalizada en los segmentos vulnerables”.
Asimismo, las autoridades deberán estar preparadas para volver a implementar temporalmente algunas de las medidas sociales de 2020, en caso que las condiciones económicas empeoren; además, recomiendan abordar las brechas sociales y de infraestructura con la política fiscal.
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2. HACER FRENTE A NECESIDADES DE LARGA DATA
A pesar de reconocer las recientes mejoras digitales de la administración tributaria, el FMI señala la importancia de redoblar esfuerzos, como incrementar más la recaudación tributaria y mejorar la eficiencia del gasto para crear margen de maniobra fiscal.
“Estos esfuerzos deberán complementarse con una racionalización de los incentivos y las exenciones impositivas”, indica la resolución.
Los técnicos del FMI mostraron su satisfacción con el programa piloto de recopilación de datos sobre pobreza, nutrición y vivienda en seis municipalidades. Emilio Fernández-Corugedo, jefe de misión del FMI para Guatemala, señaló durante la presentación que sus compañeros de los bancos Mundial (BM) y el Interamericano de Desarrollo (BID) hacen “estimaciones con muchos supuestos” para intentar estimar la situación social del país debido a la carencia de datos.
En relación con la ampliación de la encuesta de hogares e ingresos elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el FMI indica que esta muestra debería permitirles evaluar las necesidades sociales y calibrar la red de protección social nacional.
Además, destacó que “se podría ampliar el gasto social prioritario recurriendo al espacio fiscal disponible y aprovechando la experiencia adquirida gracias al programa Bono Familia”.
3. FORTALECER GOBERNANZA EN INFRAESTRUCTURA
Otro punto a fortalecer es el marco de gobernanza de la infraestructura dirigido a incrementar las inversiones de calidad.
Para obtener resultados óptimos, el FMI aconseja que las fases de planificación, asignación e implementación de la gestión de la inversión pública requieren un marco regulatorio e institucional claro, estrecha coordinación a todos los niveles del gobierno y un desempeño sostenible a lo largo de la vida útil del activo.
Asimismo, recomienda que las autoridades participen en el programa de Evaluación de la Gestión de la Inversión Pública del FMI, a fin de establecer un diagnóstico estandarizado de su marco de inversiones sobre la base de un conjunto de recomendaciones concretas.
Las autoridades del Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin) consideran oportuno participar en dicho programa.
4. AVANZAR EN LA PLANIFICACIÓN PRESUPUESTARIA PLURIANUAL
Aunque según el FMI, la prudente política fiscal en Guatemala ha coadyuvado a la estabilidad macroeconómica y permitido la sostenibilidad fiscal, aún es importante avanzar en la planificación de la presupuestación plurianual para asegurar que los logros alcanzados hasta el momento se mantengan.
Además de mantener los logros, esta planificación puede fortalecer la dotación de bienes y servicios públicos que permitan reducir los niveles de pobreza, así como ampliar y mejorar la infraestructura productiva para fortalecer la competitividad del país.
De esa cuenta, los técnicos de la entidad recomiendan una asistencia técnica para el fortalecimiento de la política fiscal de mediano plazo.
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5. ACELERAR LA POLÍTICA Y GOBIERNO Y EL PLAN DE RECUPERACIÓN ECONÓMICA
Considerando que el gobierno apunta con acierto a mejorar el clima de negocios y promover las oportunidades de inversión, las reformas destinadas a mejorar el entorno judicial y legislativo siguen siendo importantes, comentó el organismo.
Según el Fondo, la aprobación de la ley para facilitar los procedimientos de insolvencia debería promover la creación de empresas, para fortalecer el trabajo a tiempo parcial, promover la formalización y creación de oportunidades económicas, especialmente para las mujeres de la región.
En este sentido, el FMI alienta a las autoridades a acelerar la puesta en práctica de la Política General de Gobierno 2020-24 y el Plan para la Recuperación Económica.
6. REFORMAS DE SUPERVISIÓN Y REGULACIÓN BANCARIA
En relación a la conservación de solidez del sistema bancario, el FMI puntualiza que convendría acelerar las reformas encaminadas a mejorar el marco de supervisión y regulación.
Por ejemplo, las enmiendas de la Ley de Bancos y Grupos Financieros que incorporan estándares internacionales que apoyan la estabilidad financiera, y el proyecto de ley sobre ALD/LFT, que armoniza la ley con las normas del Grupo de Acción Financiera Internacional se encuentran a la espera de aprobación en el Congreso.
Asimismo, considera relevante la adopción de la nueva Ley del Mercado de Valores, así como, la preparación del marco jurídico para las tecnofinanzas y el dinero electrónico.
