Walter Juárez Estrada
La Fiscal General María Consuelo Porras Argueta no actuó por voluntad propia para destituir a Juan Francisco Sandoval Alfaro, de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad; lo hizo por órdenes superiores de un presidente de uno de los Organismos de Estado; la remoción era un hecho cantado, la jefa del MP se sentía incomoda y “con celos” por el excelente trabajo que venía desarrollando el ex fiscal, que logró combatir el crimen organizado enquistado en el gobierno desde hace muchos años.
Porras fue presionada por quien ella dice que es su “amigo”, el presidente Giammattei. Se aceleró el relevo de Sandoval, tras el testimonio –bajo reserva- del operador político Gustavo Alejos, libre bajo palabra, quien aseguró en la FECI quienes son todos los funcionarios, sectores políticos, jueces, diputados, que se acercaron a él, para hacer negocios turbios y que tenía en cartera Sandoval, para accionar contra esos sujetos, lo que le valió su salida del MP. Será en su momento que se destape la olla de criollos y que eche vuelo para denunciar a esos corruptos.
Sandoval había anunciado que iba a actuar, pese a la oposición de Porras y esa fue y no hay otra razón, para pensar que sacarlo del ruedo del MP por sus logros en su trabajo en esa fiscalía una herencia de lo que fue la CICIG desbarató la cooptación del Estado y así lo hizo ver con pelos y señales en la conferencia de prensa horas después de su remoción, donde culpó a su superior de obstaculizar su trabajo y espera que su sustituta Carla Isidra Valenzuela, le dé seguimiento a esas denuncias que se ve difícil, porque es pariente de la ex vicepresidenta Baldetti Elías y del ex presidente Serrano.
Se conoce que Sandoval, luego de la conferencia de prensa que puso al desnudo a la Fiscal Porras, salió del país rumbo supuestamente a El Salvador, escoltado por el embajador de Suecia, porque teme por su vida y la de su familia. El separado fiscal ha recibido reconocimiento a nivel internacional y nacional por su excelente trabajo en la FECI. La Fiscal General, por vergüenza debería de dimitir y será responsable que el país se vea sumergido en conflictos, se reitere la renuncia de Giammattei, culpable directo de la separación de Sandoval, se anuncian manifestaciones de los 42 cantones de Totonicapán, Sololá y bloqueos para protestar por la remoción del jefe de la FECI.
Da vergüenza y repudio que sujetos vinculados a hechos espurios y corruptos, se manifiesten en contra de Sandoval Alfaro, que tuvo la valencia se denunciar la corrupción en el Gobierno y es lamentable que Porras, en lugar de dar el ejemplo sea aliada de los corruptos, pero lo hace para lograr su reelección lo que se ve difícil, porque es incapaz, y corrupta y su personalidad no es para ocupar un puesto de tanta importancia, donde han desfilado en el MP personajes de valía, que se quiera o no ha sido por vínculos políticos con los gobiernos de turno.