Por YURI KAGEYAMA,
TOKIO
Agencia AP
El Producto Interno Bruto de Japón —la cantidad total generada por las ventas de productos y servicios— también se contrajo 1,7% en el periodo abril-junio, respecto al trimestre anterior.
La caída del PIB fue la peor desde el tsunami y el terremoto que golpearon el archipiélago en marzo de 2011. En el primer trimestre de 2011 la economía de Japón decreció a tasa anualizada de 6,9%.
Estas malas cifras ya eran esperadas debido a que los consumidores y empresas habían apurado el gasto en el primer trimestre para sobreponerse al alza de impuesto a las ventas que entró en vigor el 1 de abril. Economistas esperan que el gasto se recupere en los próximos meses.
Los resultados representan un marcado contrate con el crecimiento de 6,1% a tasa anualizada que se registró en el primer trimestre, en el que se reflejó la prisa por comprar antes del aumento de impuestos.
El gobierno del primer ministro Shinzo Abe ha tratado de poner en marcha a la tercera mayor economía del mundo luego de dos décadas de estancamiento mediante la expansión monetaria, la eliminación de regulaciones y la devaluación del yen, una medida que ha beneficiado a exportadores como Toyota y la fabricante de cámaras fotográficas Canon.
No obstante, el gobierno también muestra preocupación ante el crecimiento de la deuda pública y el aumento del impuesto al consumo, que pasó de 5 a 8% para apuntalar sus finanzas.
Yasunari Ueno, economista de mercado en jefe de Mizuho Securities, dijo que la contracción del segundo trimestre estaba dentro de lo esperado, pero la caída reflejo no sólo el aumento de impuestos sino una caída en los ingresos e incremento de precios provocados por otros factores.
«El impacto del alza de impuestos tendrá efectos de corto plazo», dijo Ueno. «Pero la economía flaquea y eso no es bueno».