Por Grecia Ortíz
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El equipo demócrata del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos publicó un informe sobre los Acuerdos de Cooperación de Asilo (ACA por sus siglas en inglés), en el que se asegura que la Casa Blanca y el DHS utilizaron tácticas coercitivas para obligar a los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador a firmar esos convenios.
El estudio comisionado por el senador Bob Menéndez, quien será el nuevo presidente del Comité de Relaciones Exteriores, revela que, hasta ahora, “ni un solo solicitante de asilo transferido de los Estados Unidos recibió asilo en Guatemala” y por eso urge a la administración de Joe Biden que tomará posesión mañana a que cancele de inmediato los convenios.
El acuerdo al que hace referencia el senador es precisamente el conocido como de Tercer País Seguro que Guatemala firmó durante el gobierno del expresidente Jimmy Morales en 2019, meses después también lo hicieron Honduras y El Salvador.
El informe titulado: “Crueldad, Coerción y Contorsiones Legales: Los acuerdos de cooperación de asilo inseguro de la administración Trump con Guatemala, Honduras y El Salvador”, evidencia cómo los acuerdos fueron diseñados efectivamente para castigar a las personas que buscan seguridad en EE. UU., enviándolas a la fuerza a países “donde de las protecciones contra persecución y la violencia son prácticamente inexistentes”.
El senador Menéndez, mencionó que: “nadie se alcanzó a imaginar que las políticas de asilo de los Estados Unidos serían manipuladas sistemáticamente para poner en peligro a personas vulnerables. Sin embargo, eso fue exactamente lo que hizo Trump con sus vergonzosos acuerdos cooperativos de asilo”.
A la vez, destaca que el documento expone cómo la administración Trump “hizo una burla del sistema de asilo de Estados Unidos, socavando la ley estadounidense y debilitando nuestro liderazgo en asuntos de refugiados”.
IGNORARON POR COMPLETO LAS PREOCUPACIONES EXPRESADAS POR EL DEPARTAMENTO DE ESTADO
Dentro de los puntos más importantes, el documento resalta que desde la implementación del primer ACA hace más de un año, ninguno de los 945 solicitantes de asilo trasladados de Estados Unidos a Guatemala ha logrado recibir asilo.
Además, menciona que los acuerdos parecen violar las leyes estadounidenses y las obligaciones bajo leyes internacionales prohibiendo el traslado de refugiados a países donde sus vidas y sus libertades no sean amenazadas.
“El exfiscal general William Barr y Kevin McAleenan, el exsecretario interino del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), determinaron que Guatemala proporciona un acceso “completo y justo” al asilo basado en verdades parciales y decidieron ignorar por completo las preocupaciones expresadas por el Departamento de Estado”, asegura la información.
Asimismo, destacan que los solicitantes de asilo transferidos de EE. UU. a Guatemala bajo el acuerdo fueron tratados de manera degradante y efectivamente fueron coaccionados a regresar a Honduras o El Salvador donde temían persecución.
ADMINISTRACIÓN ENTRANTE DEBE CANCELAR “DESASTROSOS ACUERDOS”
En ese orden, menciona que la administración Trump continúa manteniendo secretos y obstruyendo la supervisión del Congreso sobre estas negociaciones y la implementación de los acuerdos.
“A manera que nos enfocamos en terminar nuestra lucha de décadas por un sistema migratorio justo y humano, la administración entrante debe cancelar inmediatamente estos desastrosos acuerdos para cumplir con la promesa del presidente-electo Biden de suspender el tratado degradante de las personas que huyen de la persecución y la violencia”, agregó Menéndez.
El informe aboga para que la administración Biden suspenda los acuerdos con Guatemala, Honduras y El Salvador como un primer paso necesario para restaurar el liderazgo de EE. UU., en la defensa del derecho a buscar asilo y en la protección de los refugiados.
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