Pedro Pablo Marroquín Pérez
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@ppmp82
Consuelo Porras le juró protección eterna a Jimmy Morales y ha cumplido, al punto que si ella se entera de algo que pueda afectar al expresidente, lo pone a dormir rápidamente para evitar reclamos y penas innecesarias.
Ahora, le ofreció “su amistad” a Alejandro Giammattei buscando su reelección y por eso el mandatario se expresa de ella como “su amiga” y eso explica por qué ella trata de ser muy “cordial” con las situaciones que tengan que ver con el actual Presidente.
Por eso es que para salir de Gendri Reyes el Gobierno usará las renuncias que comúnmente presentan los ministros para dar libertad el gobernante y que en este primer año de mandato no fue la excepción. De la boca del vicepresidente Guillermo Castillo salió que esperarían las resultas de Porras para decidir sobre Gendri, pero no sería raro que nada salga de eso y lo de Reyes termine en una aceptación de renuncia, más no una destitución.
Porras ya sabe que desde Estados Unidos la tienen más que vigilada y por eso trata de ser lo más sigilosa posible, pero sus mismos amigos terminan develando las rutas. No es secreto que la Fiscal General usa los tuits de Yes Master y otros netcenters como fuente primaria de información y que su relación con la Fundación Contra el Terrorismo (FCT) es muy estrecha.
Todos debemos rendir cuentas ante la ley, sin duda alguna, pero una cosa es rendir cuentas y otra es el permanente deseo de quitar del camino a quien resulta incómodo para los financistas que quienes actúan como deporte en contra de los operadores de justicia independientes.
La Fiscal ordenó, callada la boca, nombrar un Fiscal Especial para investigar a Sandoval pero la Fundación hizo la bulla y les complicó la operación sigilosa. Eso provocó llegar a saber quién era la fiscal nombrada y darse cuenta que su último tuit ha sido un re tuit de, nada más y nada menos, Yes Master (les dije que es fuente primaria para doña Consuelo).
La fiscal nombrada es prestadora de servicios de la Unidad para el Desarrollo de Vivienda Popular del Ministerio de Comunicaciones y contratada los últimos 3 años por el Fideicomiso de Planificación Urbana de la Municipalidad de Guatemala.
Insisto, todos en la vida debemos rendir cuentas, pero una cosa es la fiscalización y la rendición de cuentas y la otra es el constante deseo que Juan Francisco Sandoval y su equipo renuncien porque son incómodos. Si no fuera el deseo de acoso, Porras mostraría el mismo ritmo, celeridad y deseo en otros casos, extremo que no ocurre con el poder que la nombró y al que ella ahora juró serle fiel como “buenos amigos”.
Se armó el alboroto por el tema del presupuesto. El pacto oficialista que había ya cuadrado cómo se iban a clavar los fondos dieron marcha atrás al presupuesto pero no a los acuerdos y si no disponemos de eficientes modelos de fiscalización y persecución penal para buscar la correcta aplicación de la ley, no solo el presupuesto 2021 será una enorme fiesta de corrupción sin que nos demos cuenta, sino que nuestro futuro no pintará bien para aplicar recomendaciones como las de McKinsey, presentada este año.
Doña Consuelo, no muestre celeridad para sus enemigos y vigilancia para sus amigos. La FECI es la fiscalía que nos quita la venda de los ojos, debemos exigirle rendición de cuentas, sin duda, pero usted lo que busca son excusas para que Juan Francisco Sandoval y su equipo dejen de ser incómodos para sus deseos de reelección y compromisos de impunidad.
