Catalina Barrios y Barrios
Escritora e investigadora

Conocían sus nombres, nada más. Personalmente se encontraron y se abrazaron fuertemente, como dos grandes y viejos amigos. Trabajaron en la misma empresa.

Un día él le preguntó si tenía novio. Ella no contestó. Acaso por temor a que la pregunta fuera por curiosidad.

Él repitió la pregunta. Ella no respondió. Acaso por miedo a decir que no y él se burlara entonces.

Se separaron por un tiempo y de pronto se encontraron, por casualidad, en una calle. Él iba ebrio. Al verla la abrazó fuertemente y le dijo al oído, te amo, te he amado siempre. Y se fue.

Al día siguiente, salió su fotografía en los diarios, y ella lo recortó. ¡Qué guapo! Dijo. Ahora lo llamó y le dijo, “yo también”.

Al poner atención a la imagen no leyó. Lejos estaba de confirmar el valor de la palabra. Una sola la derrumbó.

Falleció.

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