Grecia Aguilera
Ángeles y arcángeles acompañados de querubines y pequeños serafines, revoloteaban aquella tarde del 17 de noviembre de 1984 alrededor de su cunita escoltando con amor su dulce y tierno sueño, como un ensueño de cuentos de hadas. Así nació Sigrid Arlette Köper Aguilera, colmada de cariño, de luz y con la prodigiosa estrella de Dios cincelada en su frente. Ella es hija de mi querida hermana Sigrid, quien fue bautizada con ese nombre tan especial gracias a nuestro padre, el maestro don León Aguilera, quien estaba leyendo en ese entonces la autobiografía de la escritora noruega Sigrid Undset, Premio Nobel de Literatura, y le dijo a mi señora madre María del Mar, que si era niña le pondría el nombre de la famosa escritora. Así también proviene de la hermosa heroína Sigrid reina de la Isla de Thule, guerrera hábil con la espada y novia del “Capitán Trueno”, un cómic español que relata las aventuras de un caballero de la época medieval, que junto a ella y sus amigos defienden la verdad y la justicia. A mí me recuerda a la excelente pintora sueca Sigrid Hjertén, quien supo transmitir sus emociones en cada uno de sus cuadros, en los que demostró destreza en el manejo de colores fuertes. Entonces el primer nombre de mi sobrina, por llevarlo su amada madre, pienso que es por herencia. El origen de este nombre propio podría ser escandinavo, significa triunfo y sabiduría, es decir: “Aquella persona que consigue la victoria por medio de la justicia, la perfección, la belleza y la razón.” Por ser un nombre dominante se le atribuye el amor a la naturaleza, la disciplina y valentía para enfrentar cualquier situación que se presente. Ahora bien, su segundo nombre Arlette, le encantó a mi señor padre, por llamarse así la destacada periodista y comentarista francesa Arlette Chabot. Además pienso que este lindo nombre es por inspiración. De origen hebreo quiere decir “Altar de Dios” o “Salvada por fe”, razón por la cual es de suma importancia el significado de este nombre, inspirado en los siguientes versículos del Salmo 43: “Llegaré entonces a tu altar, Oh Dios, / y allí te alabaré al son del arpa,/ pues tú, mi Dios, llenas mi vida de alegría.” También en la Biblia encontramos que uno de los primeros altares para demostrar su fe absoluta en Dios, es el edificado por Abraham: “Y ató a Isaac su hijo, y lo puso en el altar sobre la leña… Entonces el ángel del Señor le dio voces desde el cielo, y dijo… no extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada, porque ya conozco que temes a Dios.” Sigrid Arlette es una joven profesional que desborda belleza por fuera y por dentro. Posee un alto coeficiente intelectual, es compasiva e idealista, firme y creativa. Cumple con sus obligaciones, gusta de hacer las cosas por sí misma y aprender algo nuevo cada día. Su espontaneidad y sentido del humor hacen reír de inmediato. Es inquieta, perceptiva, muy sensible, respetuosa de quien lo merece y capaz de tomar sus propias decisiones. Además tiene una especial atracción hacia la Luna, no vive en ella pero la contempla con ansias, sobre todo cuando es Luna llena o Plenilunio. Por ese amor platónico que mi sobrina Sigrid Arlette siente hacia la Luna, es mi deseo dedicarle con especial cariño mi poema titulado “Selene” que manifiesta: “Luz sumergida/ en terciopelo negro./ Astro del amor/ sagrado Ramadán de los profetas./ Heraldo del crepúsculo/ cocuyo del espacio/ lente mágico/ pálido reflejo/ entre campanarios y mezquitas/ luz y sombra/ entre lotos y nenúfares./ Luna/ canto del poeta/ vidente observadora/ novia mística/ sacerdotisa y vieja amiga/ amante del sol atesorada./ Plomiza cenicienta/ joven diosa/ enviada zahorí/ resurgida/ en torbellinos planetarios/ atacir de seres portentosos./ Luna en mares de crisis/ lluvia y nubes”.