Edith González
Es en la década de 1930-1940 que se funda la Facultad de Ciencias Económicas en Guatemala. En ese entonces la economía estaba basada en la producción agrícola y su exportación de café y banano.
Un grupo de alumnos egresados de la Escuela de Comercio, realizan gestiones para crear un centro de estudios superiores en el campo de las ciencias económicas. Por lo que a través del decreto 1972, del 25 de mayo de 1937, se decide la creación de la Facultad de Ciencias Económicas, como parte de la Universidad Nacional, para “establecer en el país estudios económicos superiores”.
La Facultad se inaugura el 30 de junio e inicia sus actividades el 6 de agosto del mismo año. Luego, en 1940, se funda la Asociación de Estudiantes de Ciencias Económicas, que desde 1971 lleva el nombre del dirigente estudiantil “Manuel de Jesús Cordero Quezada”.
Luego de la Revolución de Octubre la Facultad de Ciencias Económicas desarrolla actividades académicas y de investigación e información, que contribuyen a interpretar científicamente la realidad nacional y propiciar las políticas de cambio necesarias para mejorar la calidad de vida de la mayoría de los guatemaltecos.
Lo que unido a la ampliación de las funciones de la administración pública y la actividad productiva, determinan una importante demanda de economistas y de contadores públicos y auditores en instituciones o empresas de nueva creación, como: Ministerio de Economía y de Trabajo, Banco de Guatemala, Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, Instituto de Fomento de la Producción, Departamento de Fomento Cooperativo y otras.
Este año en el marco del 81 aniversario de la Facultad de Economía se llevó a cabo el jueves 2 de agosto un reconocimiento a los mejores estudiantes en 2017, Excelencia Académica, entre los que se encuentra Fryda Regina Godoy García por tener un promedio de 89.75 puntos en la carrera de Contaduría Pública y Auditoría.
Fryda nació en Jocotenango, Sacatepéquez, donde estudió la primaria, en la Escuela Rafael Rosales; pasó luego a estudiar básicos en la Escuela Constancia C. Vigil, en la Antigua Guatemala, y más tarde cuando su amor por las cuentas se despertó se graduó como perito contador.
Hace un año a instancias de su tío Samuel se presentó cono voluntaria a los Bomberos Municipales Departamentales en donde a la fecha labora como auxiliar ya que por a su buen trabajo fue contratada como auxiliar en la institución en donde se siente cómoda y realizada, además de agradecida de poder servir a los servidores: los bomberos, además, que le fue otorgado permiso para continuar sus estudios, una ayuda que considera invaluable.
Por su parte, sus padres Juan Pablo Godoy y Lesbia Azucena García de Godoy se sienten muy orgullosos de su hija y agradecidos con la institución que le brinda una oportunidad de superación. Lo mismo que su hermano menor Yahir, y el mayor Juan Pablo cuya hija de 5 años, Zoe, dice que quiere ser bombero cuando mira a su tía Fryda con el uniforme administrativo de los Bomberos Municipales Departamentales.