POR KIMBERLY LÓPEZ
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El jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), Iván Velásquez, en una entrevista con medios europeos, manifestó su temor por el riesgo de que la Comisión no continúe en el país por el “descomunal” desafío al que se enfrenta. Al respecto, el Ejecutivo informó que aún no han analizado la continuidad de la Comisión en Guatemala.

Ante las declaraciones  del comisionado Iván Velásquez en Bélgica, en donde manifestó temor por el riesgo de que no se extienda el mandato de CICIG en el país bajo la gestión del presidente Jimmy Morales, el Ejecutivo respondió que por ahora no han analizado ese tema.

El secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Alfredo Brito, informó que por ahora el Ejecutivo no ha analizado el tema y que lo hará en su momento.

“De momento la CICIG tiene una vigencia en el país y en este como en todo proceso hay un momento oportuno para discutir el tema y en ese sentido no se está discutiendo aún”, declaró Brito.

El funcionario insistió en que todo tiene un momento y que el análisis para la permanencia de la CICIG se tendrá que realizar más adelante.

El presidente Jimmy Morales pidió la continuidad de la Comisión por dos años más al inicio de su gestión. De esa cuenta, la Comisión tiene vigencia hasta septiembre de 2019.
Según la Cancillería no hay plazos definidos para hacer una solicitud de prórroga de dicho mandato y es el presidente Jimmy Morales quien debe hacerla.

VELÁSQUEZ SEÑALA RIESGOS

En la entrevista que Velásquez otorgó a medios internacionales en Bélgica, habló de la resistencia que ha habido de parte de ciertos sectores, e incluso del gobierno, ante las investigaciones que han destapado prácticas de corrupción en el país.

Velásquez lamentó que «todavía hay tantas fuerzas que confrontan la lucha contra la corrupción que no tenemos la tranquilidad de que vamos sin duda hacia adelante”.

Además, declaró que «el avance en la lucha contra la corrupción y contra la impunidad en materia de violación de derechos humanos» ha generado una cierta resistencia de los sectores que se han visto afectados, como militares, empresarios o el propio Gobierno.

Estos grupos, indicó, han conformado un frente de reacción para impedir el avance de la CICIG.

«No existe ningún sector intocable, que las investigaciones se hagan donde haya que hacerlas y, si encontramos elementos probatorios, los casos se presentan ante los jueces independientemente de quiénes sean los investigados», reiteró.

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