Río de Janeiro
Agencia (dpa)
El Gobierno de Michel Temer abrió una enorme reserva natural de la Amazonía brasileña para la explotación por parte de la minería privada, según un decreto publicado hoy en el boletín oficial.
La llamada Reserva Nacional del Cobre y Asociados (Renca), ubicada en un territorio de unos 40 millones de hectáreas (47 mil kilómetros cuadrados) entre los estados de Pará y Amapá en el norte del país, había sido creada en 1984, todavía durante la dictadura militar, y estaba reservada hasta ahora sólo al Estado.
La iniciativa era barajada desde comienzos de año como parte de las medidas que impulsa el Gobierno conservador de Temer para intentar reanimar la maltrecha economía del gigante brasileño.
Se estima que la reserva tiene yacimientos de cobre y oro, entre otros metales.
Organizaciones ecologistas como WWF criticaron la medida como una amenaza potencial para áreas naturales protegidas ubicadas en esa región, así como para la población local.
«Habrá un empeoramiento de conflictos agrícolas y amenazas a los pueblos indígenas y las poblaciones tradicionales», vaticinó el director de WWF en Brasil, Mauricio Voivodic, en un comunicado emitido por el grupo ecologista.
«Lo que nos sorprende es la falta de diálogo y de transparencia del Gobierno que, por medio de un decreto, abre para la minería un área que coloca en riesgo a los pueblos indígenas y a las unidades de conservación de potencial ecológico relevante, en el corazón de la Amazonía», lo secundó el cordinador de Políticas Públicas de WWFF, Michel de Souza Santos.
El Gobierno conservador de Temer es criticado desde hace tiempo por una política de apertura de áreas protegidas para la explotación a gran escala por parte de la minería, la agricultura y la ganadería.
El ministro de Agricultura y Ganadería de Temer, Blairo Maggi, es uno de los grandes productores de soja del mundo.
Durante el mandato de Temer, que asumió el poder en 2016, se han multiplicado también las denuncias sobre conflictos entre grandes latifundistas y grupos indígenas. Estos últimos han sido blancos de varios ataques sangrientos en los últimos meses.