Por Carlos Soto Pineda

¿Confesión o autocrítica…? me da algo parecido a vergüenza que aunque no parezca debo admitir que descubrí la faceta ecológica de la obra de Mario Payeras, apenas hace 18 años. Acepto que mi ignorancia sobre este genial ser humano se disipó cuando cumplí 27 años, gracias a Iván Cabrera un amigo visitador médico que me prestó-obsequió “El mundo como flor y como invento”, vaticinando que me iba a fascinar.

Ya había leído “Los días de la selva”, “El trueno en la Ciudad”, “Los fusiles de Octubre”, y los dimensionaba (craso error) sólo como fascinantes obras narrativas sin percatarme de su contenido dialéctico, ni de sus alcances histórico-críticos.

Mario Payeras Solares nació en Chimaltenango el jueves 15 de Agosto de 1940. Fue un escritor que actuó como pensó, que vivió con el ejemplo, que fue capaz de conservar la ternura a pesar de la crudeza de la época y de la guerra popular revolucionaria; un poeta-comandante de cultura tan vasta que se anticipó a la historia, que hablaba alemán y español, y dominaba el francés, el rumano e italiano. Murió en México un lunes 16 de Enero de 1995. De su fallecimiento 21 años, de su nacimiento 76 y en Guatemala siguen sin apreciar la dimensión de su obra literaria ni reconocer su extraordinaria vida y trayectoria revolucionaria que trascendió a pesar del sectarismo y la envidia tan característicos del guatemalteco.


Asista

Viernes 9 de diciembre del 2016 a partir de las 19:00 horas en el Conservatorio Nacional de Música de Guatemala, 3ª. Avenida y 5ª. Calle esquina zona 1 ciudad de Guatemala. Admisión Gratuita. (Llevar una velita para encender en la entrada).

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