Por HARUKA NUGA
TOKIO /Agencia AP
Los participantes usaron aparatos llamativos para mostrar su tecnología y llamar la atención en el evento, que comenzó el martes. Tristemente para los amantes de esos aparatos, los robots no están a la venta
DINOSAURIO
El robot dinosaurio de TE Connectivity, el TE Saurus, permite a los usuarios experimentar un encuentro cercano con un reptil de 2,1 metros (6 pies y 11 pulgadas) de estatura sin viajar en el tiempo.
Una aplicación en un teléfono celular multiusos puede hacer que el dinosaurio salte o camine. Una sacudida del teléfono hace que el TE Saurus ruja. El reptil también puede jugar trivia, en la que los usuarios responden a preguntas por medio de la aplicación.
PING-PONG
Pese a su intimidante parecido a una araña, el robot de tres patas de OMRON Corp. es un oponente tranquilo en ping-pong. Observa a su oponente humano para predecir el sendero de la pelota. Aun así, el robot no dificulta las cosas y falla disparos de vez en cuando. Con cinco motores para controlar el movimiento de la paleta, está programado para enviar el servicio de una forma que resulta fácil a sus rivales.
«Este robot de ping-pong es realmente una demostración de cómo un robot puede interactuar con una persona y reaccionar de forma apropiada», dijo Takuya Tsuyuguchi, un gerente de Omron. «Nosotros vemos a este robot en el futuro siendo usado quizás en una fábrica o en una línea de producción, en un papel en el que tendría que interactuar con un trabajador para hacer o construir algo. Esto involucraría que el robot comprendiera las necesidades de su contraparte humana y respondiera apropiadamente».
PORRISTAS
Tienen apenas 36 centímetros (14 pulgadas) de estatura, pero su coordinación es impecable. Murata Manufacturing, importante productor de componentes electrónicos, presenta un grupo de 10 porristas robóticas con pompones de colores cambiantes que usan sensores giroscópicos para rodar en bases esféricas sin perder el equilibrio.
«Estos robots usan nuestra tecnología de equilibrio combinada con tecnología que impide, en tiempo real, que los robots choquen», dijo Tomoyuki Mori, ingeniero de Murata. «Usa además tecnología que coordina el movimiento de todos los robots de forma sincronizada».