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Buenos Aires
AGENCIA/dpa

La Confederación General del Trabajo (CGT), la principal central obrera argentina, aseguró hoy que la mitad de la población «tiene dificultades para llegar a fin de mes» con su salario debido al programa económico del Gobierno.

«¿Quién puede sostener que con media población que tiene dificultades para llegar a fin de mes (se) puede creer en una democracia y en la república?», consideró el sindicalista Juan Carlos Schmid, uno de los tres líderes de la CGT.

El dirigente gremial fue el único orador en el acto que la central obrera realizó ayer en Buenos Aires con motivo del Día Internacional del Trabajador.

En su discurso, Schmid también cuestionó al presidente argentino, Mauricio Macri, por poner en marcha «un trazado económico que ninguno (de los trabajadores) comparte».

Según estadísticas oficiales difundidas en abril último, Argentina sufrió en 2016 el cierre de 1 mil 579 empresas y la pérdida de 44 mil 465 puestos de trabajo solo en el sector privado de su economía.

Como rechazo a la situación económica y laboral del país la CGT realizó el pasado 6 abril la primera huelga nacional contra el Gobierno argentino, que tuvo un alto acatamiento.

«Feliz día para todos los trabajadores argentinos, que son la fuerza que mueve al país hacia el futuro», expresó hoy, por su parte, el jefe de Estado argentino en sus redes sociales.

Para el Gobierno, «después de un año difícil» aumentó la creación de empleo, dijo el Ministro de Trabajo, Jorge Triaca. «Son señales de que Argentina empieza a retomar un sendero de crecimiento», agregó en declaraciones a radio Mitre, de Buenos Aires.

Sin embargo, reconoció que el Gobierno debe incorporar todavía a 4.5 millones de trabajadores -alrededor del 30 por ciento de la población económicamente activa- que no están registrados formalmente y a 1.5 millones de desocupados.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) difundió semanas atrás que los salarios que perciben los trabajadores argentinos perdieron aproximadamente 6 puntos de poder adquisitivo frente a una inflación que en 2016 rondó el 41 por ciento.

Por su parte, la Iglesia argentina alertó acerca de una «creciente desocupación» en el país. «Lamentablemente hoy ni siquiera los trabajadores registrados tienen un ingreso adecuado y unos cuantos siguen debajo de la línea de pobreza», comentó el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano.

Crisis

44 mil 465 puestos de trabajo
perdió Argentina en 2016 en el sector privado.

¿Quién puede sostener que con media población que tiene dificultades para llegar a fin de mes (se) puede creer en una democracia y en la república?
Juan Carlos Schmid, sindicalista, uno de los tres líderes de la CGT.

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