Brasilia
Agencia/dpa
El presidente de Brasil, Michel Temer, anunció hoy un nuevo paquete de medidas «microeconómicas» para intentar afrontar la fuerte recesión en el país sudamericano.
Las medidas, que simplifican trámites burocráticos y amplían las facilidades de créditos para empresas y trabajadores, entre otros aspectos, buscan generar empleo e impulsar el crecimiento, explicó Temer en una conferencia de prensa en Brasilia.
«Estas medidas apuntan a reanimar la economía brasileña en este momento en el que nosotros queremos crecimiento en el país», agregó el mandatario al presentar las medidas de apoyo «microeconómico» como complementarias a las reformas macroeconómicas que impulsa su Gobierno.
«En el ambiente macroeconómico están siendo tomadas medidas para sacarnos de la recesión», dijo Temer, que mencionó entre ellas la reciente enmienda constitucional para congelar el gasto público durante 20 años y la prevista reforma del sistema de pensiones.
El presidente compareció acompañado entre otros funcionarios su ministro de Hacienda, Henrique Meirelles.
Las medidas anunciadas hoy dan facilidades a las pequeñas empresas para refinanciar sus deudas con el banco de fomento público de Brasil, el BNDES, e intentan reanimar el consumo.
El programa de regularización tributaria abarca a las deudas que vencieron hasta finales de noviembre. «En un momento de crisis, es muy importante que permitamos a las empresas que regularicen su situación fiscal», explicó Meirelles.
El Gobierno prevé asimismo ampliar los programas de «microcrédito productivo» de actualmente 120.000 reales a hasta 200.000 reales por año (35.000 a casi 60.000 dólares).
Brasil cerrará 2016 por segundo año consecutivo con una caída de su Producto Interno Bruto (PIB) de más del tres por ciento, después del retroceso de 3,8 por ciento registrado el año anterior. La tasa del desempleo en la primera economía de América Latina alcanzó el 11,8 por ciento este año, con 12 millones de personas afectadas.
Temer, que asumió el cargo formalmente en agosto tras la destitución de su predecesora Dilma Rousseff, ha señalado en varias ocasiones que la prioridad de su mandato, que acaba en diciembre de 2018, será impulsar la recuperación económica.
El Congreso promulgó hoy mismo una reforma constitucional para limitar el gasto público en los próximos 20 años. La medida, aprobada esta semana en el Senado, generó fuertes protestas en las calles.
Estas medidas apuntan a reanimar la economía brasileña en este momento en el que nosotros queremos crecimiento en el país.
Michel Temer, presidente de Brasil.
