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Pekín
Agencia/dpa

El ministro de Finanzas de China, Lou Jiwei, defendió hoy los planes de su Gobierno de contraer nuevo endeudamiento para implementar las reformas económicas que son necesarias en el país.

Un mayor déficit también ayudará a China a evitar un descenso del crecimiento, argumentó el titular de Finanzas ante la prensa en Pekín.

Con ocasión de la asamblea anual del Congreso Nacional del Pueblo, el Gobierno chino había presentado el pasado fin de semana su proyecto presupuestario para 2016, que prevé un aumento del déficit en este año en 560 mil millones de yuan, hasta 2,18 billones de yuan (304 mil millones de euros o 334 mil millones de dólares).

De esta manera, el déficit presupuestario llegaría por primera vez al tres por ciento del producto interior bruto (PIB), un nivel que los economistas consideran como asumible. Según Lou Jiwei, el déficit representó el año pasado el 2,4 por ciento del PIB.

El gasto público de China se incrementa debido a que el país tiene que impulsar la costosa reorganización de su economía. China pretende reducir el tamaño de su industria pesada, lastrada por un exceso de capacidad, para lograr un mayor crecimiento mediante innovaciones y el desarrollo del sector de servicios.

Está previsto que millones de puestos de trabajo se eliminen en los próximos años tan solo en las industrias del carbón y el acero. Como consecuencia, es probable que el gasto en pensiones y prestaciones sociales aumente notablemente, opina el experto Mattias Stepan, del instituto de estudios chinos Merics, con sede en Berlín.

El nuevo endeudamiento de China lleva ya varios años aumentando a un ritmo preocupante: desde 2007, las obligaciones financieras del gigante asiático se han duplicado holgadamente. Lo que preocupa especialmente es el elevado nivel de las deudas de empresas estatales y de los gobiernos provinciales.

Según estimaciones de los economistas, la deuda total de China podría llegar a suponer en el año 2019 el 283 por ciento del PIB. Aun así, el ministro de Finanzas chino solo prevé un «ligero aumento» de los créditos morosos.

El primer ministro chino, Li Keqiang, presentó el fin de semana ante los casi 3 mil delegados al Congreso Nacional del Pueblo el nuevo plan quinquenal, que prevé para los próximos cinco años un crecimiento económico de solo entre un 6,5 y un 7,0 por ciento como promedio. Sin embargo, varios expertos han manifestado su escepticismo sobre si es posible alcanzar esta meta.

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