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Por CHRISTOPHER S. RUGABER
WASHINGTON
Agencia/AP

Los estadounidenses redujeron sus gastos en tiendas y restaurantes en junio, señal de que mantienen su cautela a pesar del fuerte aumento del empleo el año pasado.

Las ventas minoristas cayeron 0,3% en junio a su cifra más baja desde febrero, cuando el clima invernal obligó a la gente a limitar las salidas, informó el Departamento de Comercio. En mayo se registró un aumento de 1%, aunque revisado a la baja luego de la estimación preliminar de 1,2%.

Los economistas preveían que los consumidores frenarían el gasto después del aumento de mayo, pero la baja fue mayor que lo pronosticado.

Indica que los consumidores, aleccionados por la recesión que comenzó en 2008, son renuentes a gastar a pesar de la caída del desempleo y de los precios de la gasolina con respecto al año anterior.

Aun así, las estadísticas muestran que los consumidores gastaron más en el trimestre abril-junio que en los tres primeros meses del año. Eso deberá aumentar el crecimiento en el segundo trimestre entre 2,5% y 3% del índice anual, lo que supera al primer trimestre cuando la economía decreció en 0,2%.

Hay señales de que los consumidores están más confiados, lo que sugiere que las ventas podrían recuperarse en los próximos meses.

«Un mes bajo no es tendencia», dijo Ian Shepherson, economista principal de Pantheon Macroeconomics. «Esperamos que el consumo se fortalezca en el segunda semestre».

El índice de confianza del consumidor del Conference Board aumentó en junio a su segundo nivel más elevado desde que terminó la recesión en 2009. Ahora está 17,4% por arriba del año anterior.

Los estadounidenses solicitan más préstamos: el crédito al consumidor, que incluye préstamos para autos, estudiantes y tarjetas de crédito y excluye hipotecas, aumentó 6,5% en mayo comparado con el año anterior.

Los gastos en restaurantes y bares, un área fuerte en meses recientes, cayó 0,2%. La venta de materiales de construcción bajó 1,3%. Ventas en línea y por catálogo reportaron una caída de 0,4% en las ventas.

Las ventas en agencias de autos cayeron 1,1%, pero esa caída vino después de una gran alza en mayo, cuando las compras de autos alcanzaron sus niveles más elevados en la década.

En general, el gasto del consumidor aumentó en mayo, dijo el Departamento de Comercio. Dio un salto del 0,9%, el mayor en casi seis años, conforme el ingreso aumentó y los estadounidenses ahorraron menos.

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