La riqueza petrolera de Rusia, su industria de armas, sus lazos históricos para mantener cierto grado de influencia en las capitales extranjeras y su significativa participación en las exportaciones de alimentos y otros insumos en el mundo permite explicar el por qué algunos países quieren mantener una relación amistosa con la nación liderada por Vladimir Putin, heredera de la desaparecida Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.
Según expertos y exfuncionarios estadounidenses consultados por NBC News, a pesar de la indignación en las capitales occidentales por el conflicto en Europa del Este, otros países, incluidos algunos aliados y socios de Estados Unidos, se han mostrado “reacios” a confrontar a Rusia o a apoyar las sanciones económicas.
ALIANZAS POLÍTICAS Y DE DEFENSA
Desde una perspectiva más política y de defensa, el medio estadounidense puntualizó que la India depende de armas fabricadas en Rusia; Israel necesita la cooperación rusa para atacar a Siria y los estados árabes del Golfo miran en esa dirección para ayudar a “administrar el mercado petrolero”.
A la fecha, el número de países que han declarado su apoyo incondicional a Rusia desde que sus fuerzas entraron en Ucrania es pequeño, entre ellos se incluyen los regímenes de Siria, Bielorrusia, Eritrea, Corea del Norte, Cuba y Venezuela.
Sin embargo, los expertos no están seguros si las naciones que “están a ambos lados de la valla” pueden ofrecer un salvavidas a Moscú, o si estos estados pueden desempeñar un papel significativo en la mediación de un eventual fin del conflicto.
CHINA EL POSIBLE “SALVAVIDAS” DE RUSIA
Por su parte, China destaca como la única nación con mayor peso económico y poder global para ayudar a suavizar el golpe por las duras sanciones económicas introducidas por Estados Unidos y la Unión Europea, o para persuadir potencialmente a Putin de retirar su ofensiva militar en Ucrania.
China se presenta a sí misma como neutral con la “crisis” en Ucrania, de acuerdo con NBC News, desde que los gobiernos de EE. UU. y Europa impusieron sanciones a Moscú, las exportaciones chinas a Rusia han aumentado, incluidos equipos eléctricos, vehículos y maquinaria, mientras que Moscú ha exportado productos derivados del petróleo y madera.
Además, China dice que ha enviado ayuda humanitaria a Ucrania y ha acusado a Estados Unidos de agravar el conflicto por despachar armas al gobierno de Kiev. Sin embargo, Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN dijo el pasado 15 de febrero que “dos potencias autoritarias, Rusia y China están operando juntas”.
ARABIA SAUDÍ NO SE RESPONSABILIZA POR LA ESCASEZ DE PETRÓLEO
Adicionalmente, Arabia Saudí dijo el pasado 21 de marzo que “no asumirá ninguna responsabilidad por ninguna escasez en los suministros de petróleo para mercados globales”, después de haberse reportado ataques de rebeldes yemeníes hutíes que han afectado a la producción de crudo del reino.
En concordancia con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros productores de petróleo, Arabia está de acuerdo en limitar el aumento de producción pese a la subida de los precios durante la guerra de Rusia en Ucrania.
“La comunidad internacional debe asumir su responsabilidad de mantener los suministros de energía”, afirmó el Ministerio de Exteriores del reino; además, reiteró que los ataques hutíes afectarán a “la capacidad de producción del reino y su capacidad para cumplir sus obligaciones”, situación que amenazaría la “seguridad y estabilidad de los suministros de energía para mercados globales”.