Ka'dar Hollman y Adrian Amos de los Packers de Green Bay intentan detener a Rob Gronkowski de los Buccaneers de Tampa Bay en el encuentro por el campeonato de la NFC. Foto la hora: Matt Ludtke/AP

Por STEVE MEGARGEE

GREEN BAY, Wisconsin, EE.UU.

Agencia (AP)

Tom Brady tiene un nuevo equipo, en una nueva ciudad. El destino es el mismo: otro Super Bowl.

Y también en casa.

El hombre con seis títulos de la NFL se convirtió en el primer quarterback que disputará el Super Bowl en el estadio de su equipo. Le fue de mucha ayuda que la defensa de Tampa Bay capturara a Aaron Rodgers cinco veces, y también una curiosa decisión final de los Packers en cuarta oportunidad y gol, para que derrotaran ayer 31-26 al primer sembrado Green Bay y con ello ganaran el título de la Conferencia Nacional.

«Es increíble tener otro triunfo como visitantes y ahora tenemos un juego en casa, y quién hubiera pensado en un Super Bowl como locales para nosotros», dijo Brady. «Pero lo logramos».

«Creo que la defensa fue espectacular. Lo han hecho todo el año», agregó.

Los Bucs (14-5) enfrentarán a los Chiefs de Kansas City en el Estadio Raymond James de Tampa Bay el 7 de septiembre. Ningún equipo ha disputado el Super Bowl como local en 54 ocasiones anteriores.

«Vamos a casa», dijo el coach de los Bucs, Bruce Arians, cuyo primer trabajo como coach de la NFL fue como asistente en 1989 con Kansas City y ahora disputará su primer Super Bowl como entrenador en jefe. «Vamos a casa para ganar».

Brady regresa al Super Bowl en su primer año con Tampa Bay tras llegar a ese partido nueve veces con los Patriots de Nueva Inglaterra. Completó 20 de 36 pases para 286 yardas y tres touchdowns, pero también lanzó para tres intercepciones y Tampa Bay dejó escapar la mayor parte de una ventaja de 18 unidades. Shaquil Barrett y Jason Pierre-Paul sumaron cinco capturas de quarterback para ayudar a los Bucs a sumar ocho triunfos consecutivos como visitantes, un récord de la franquicia.

«Tom es el más grande de la historia», dijo el receptor de los Bucs Scotty Miller, quien atrapó un pase de touchdown de 39 yardas cuando quedaba un segundo en el reloj antes del medio tiempo. «El año pasado terminamos 7-9. Este año vamos al Super Bowl. Él es la principal razón».

Los Bucs pusieron fin a una racha de siete triunfos de Green Bay. Recibieron ayuda de una extraña decisión del entrenador de los Packers, Matt LaFleur, a dos minutos del final y con el marcador 31-23.

Después de que Rodgers lanzó tres pases incompletos y el equipo quedó en cuarta oportunidad y gol desde la yarda ocho, los Packers eligieron un gol de campo de 26 yardas de Mason Crosby a 2:05 minutos del final.

«Cada vez que no te funciona, lo lamentas, ¿no es así?», admitió LaFleur. «Simplemente son las circunstancias de tener tres oportunidades e irse sin yardas. Y sabiendo que no sólo necesitas el touchdown, sino los dos puntos. Como lo vi es que teníamos cuatro tiempos fuera con la advertencia de los dos minutos».

Entonces Tampa Bay agotó el reloj y los Packers (14-4) se quedaron tendidos en el terreno.

Green Bay ha perdido cuatro veces el juego por el campeonato de cen siete temporadas. No ha llegado al Super Bowl desde que ganó el título en el 2010.

Rodgers completó 33 de 48 pases para 346 yardas, con tres touchdowns y una intercepción, pero su foja en duelos por el campeonato de conferencia como quarterback titular cayó a 1-4

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