Por MICHAEL MAROT
INDIANÁPOLIS
Agencia (AP)
La realidad golpeó fuerte a los Colts de Indianápolis tan pronto como ingresaron en el vestuario ayer por la mañana.
El casillero de Andrew Luck se encontraba vacío, la placa con su nombre no estaba más y su era ha terminado.
El entrenador Frank Reich y el gerente general Chris Ballard comenzaron el día con una reunión del equipo para discutir cómo procederían los Colts sin su quarterback titular, quien anunció el sábado su retiro.
El reemplazo de Luck, Jacoby Brissett, subió al podio en una sala de prensa abarrotada, el receptor estelar T.Y. Hilton vistió una gorra de béisbol de la Universidad de Stanford en honor a su compañero de generación en el draft de 2012. Y después llegó el momento de volver al trabajo.
“En cierto sentido esta historia es única e impactante”, dijo Reich. “Pero sucede suficientes veces que un equipo pierde a un gran jugador, y eso impulsa a un conjunto a un campeonato”.
El expastor tiene una amplia variedad de fuentes para hacer énfasis en el tema. Algunas se relacionan con experiencias propias.
En 1989, cuando Jim Kelly se lesionó, la mayoría pensó que los Bills de Buffalo moderarían las exigencias para Reich, quien era su suplente.
En cambio, el entrenador Marv Levy no hizo modificación alguna, y Reich respondió liderando a los Bills a tres victorias consecutivas. Tres años después, con Kelly fuera de nuevo, Reich ganó dos partidos de playoff, incluida la remontada más grande en la historia de la postemporada para que los Bills eventualmente ganaran su tercer título consecutivo de la Conferencia Americana.
En 2017, Reich era el coordinador ofensivo de Filadelfia cuando el candidato a Jugador Más Valioso de la liga, Carson Wentz, se desgarró el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, una lesión que muchos esperaban que minara las esperanzas de campeonato de los Eagles. En cambio, Nick Foles dio un paso al frente y condujo a Filadelfia a su primer título desde 1960.
Y está también el guion propio de una película, hace dos décadas, cuando un empacador de tiendas de conveniencia se convirtió en el quarterback Kurt Warner, quien ingresó en lugar de Trent Green y condujo a los Rams de San Luis a un título de Super Bowl. Warner también fue el Jugador Más Valioso de la liga.
Pero Reich y los Colts saben que esta temporada no se trata del pasado. Deben concentrarse en sumar su propio capítulo único a la historia de los no favoritos para llenar el hueco en el medio del vestidor.
“Necesito ser Jacoby Brissett, simplemente yo mismo”, señaló el nuevo quarterback titular cuando le preguntaron sobre la necesidad de reemplazar permanentemente a su amigo cercano. “Siempre ha sido prepararse como si fueras el titular”.
Fuera del camerino, muchos dudan que Brissett pueda emerger como el siguiente Foles, Warner o incluso como un Reich. Brissett tuvo foja de 4-11 en 2017, convirtiéndose en titular menos de dos semanas después que Indianápolis lo adquirió en un canje con Nueva Inglaterra, detrás de una línea ofensiva que permitió la mayor cantidad de capturas en la NFL esa temporada.
En torno al complejo de entrenamiento de los Colts, sin embargo, hay muchos creyentes de Brissett.
“Desde el primer día, vine y observé todos los videos de Jacoby y dije que este chico es uno de los mejores 20 quarterbacks, este muchacho es un quarterback titular en la NFL”, señaló Reich. “Este chico tiene todo, no sólo cumple requisitos. Es un gran líder y estoy emocionado por él”.