San José
DPA
La selección de Costa Rica redujo al mínimo sus aspiraciones de clasificarse a los octavos de final en el Mundial de Fútbol de Rusia, no sólo por haber perdido ante Serbia el domingo, quizá su rival más accesible en el grupo E, sino por su planteamiento netamente defensivo, coincidió ayer en señalar la prensa deportiva local.
El grupo de los costarricenses es uno de los más duros del Mundial, pues está también el todopoderoso Brasil, con el que los ticos se medirán el viernes, y Suiza.
El inicio de la serie resultó más que comprometedora para Costa Rica, la gran revelación en el Mundial de Brasil, donde accedió a cuartos de final, especialmente por el empate 1-1 con que concluyó el segundo partido del grupo, entre brasileños y suizos.
Este resultado, además del triunfo serbio 1-0 sobre Costa Rica, obligará a Brasil a lanzar toda su maquinaria contra los costarricenses.
Las críticas no cesan contra el timonel costarricense Óscar Ramírez, tal como ocurrió en los días previos con los partidos amistosos contra Inglaterra y Bélgica, por su planteamiento conservador y defensivo, dirigido prácticamente a «no perder».
«Cuando no salir goleada es insuficiente para la Sele», dijo hoy el diario «La Nación», que criticó la «falta de imaginación» de la tricolor en su parte ofensiva.
«Amargo Debut», tituló por su parte el «Diario Extra». «Si había un partido claro para ganar en el Mundial de Rusia 2018 era ante Serbia», indicó la crónica del diario, al insistir en que Costa Rica debía haber ganado «sí o sí».
El juego defensivo de los costarricenses también fue criticado por otros medios deportivos, como Canal 7, que dijo que Costa Rica quedó «al borde del abismo» y Repretel, que enfatizó en el mal comienzo de los «ticos» en Rusia.