Londres
DPA
El técnico Josep Guardiola cosechó su primer título ayer al frente del Manchester City con la victoria 3-0 ante el Arsenal en la final de la Copa de la Liga, el primer trofeo de la temporada del fútbol inglés.
Sergio Agüero, a los 18′, empezó a definir un encuentro que no tuvo más historia cuando Vincent Kompany y David Silva, a los 58′ y a los 65′, marcaron los otros dos restantes goles del líder de la Premier League, que sigue en carrera para sumar dos trofeos más.
«Es importante», dijo el español a Sky Sports. «Estamos muy felices, y felicitaciones a todos en el Manchester City, y a nuestros aficionados», dijo. «Este trofeo es para el Manchester City, no para mí».
Tras quedar eliminado contra todo pronóstico de la Copa Inglesa, donde cayó ante el Wigan de tercera división, el City no quería dejar escapar una nueva oportunidad. La magnífica temporada que está haciendo el equipo de Guardiola necesitaba comenzar a cristalizar en títulos.
El Arsenal también lo hizo medianamente fácil. Así, un error defensivo del alemán Shkodran Mustafi, que dejó pasar un balón, citó a Agüero con el arquero David Ospina.
El argentino definió con tranquilidad, levantando el balón por encima del guardameta colombiano, y dio un golpe que sería a la postre definitivo.
Porque si bien el equipo de Arsene Wenger intentó acercarse, siempre chocó con la solidez defensiva del City, también con sus peligrosas transiciones en ataque y, desde luego, con la convicción de nunca ceder la iniciativa.
El campeón, además, contó con suerte. Un córner a ras fue rematado por Ilkay Guendogan, con la fortuna de que el disparo fue desviado a gol por Kompany.
Unos cuantos minutos después, Silva liquidó el asunto al abrirse espacio en la defensa «gunner» y sacar un potente zurdazo cruzado, imposible para Ospina.
Si esta final podía servir como bálsamo para alguno de los dos, alicaídos tras pobres resultados recientes, lo será sin duda para el City, que toma nuevo aire en su búsqueda de más títulos. Ahora quedan la Premier League y la Liga de Campeones.
En la primera, son líderes con 13 puntos de ventaja, mientras que en el torneo continental tienen prácticamente la clasificación a cuartos de final sellada tras el 4-0 del partido de ida ante el Basilea.
El Arsenal, por su parte, sumó una tercera derrota en igual número de finales del certamen bajo el mando de Wenger, cada vez más presionado por la afición.
«Cometimos un error en el primer gol pero los controlamos bastante bien en el primer tiempo», dijo el francés.
