Londres
DPA

El británico Sebastian Coe, presidente de la Asociación Mundial de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés), elogió la organización de los Mundiales que terminaron ayer en Londres.

«Han hecho un trabajo sensacional», expresó el dirigente en el día de cierre del evento.

«No puedo recordar un momento en que la competición haya sido tan reñida y que las historias alrededor de ella hayan sido tan emocionantes», añadió.

«Londres 2017 le devolvió la confianza al atletismo», respondió Ed Warner, jefe del comité organizador del certamen. «El deporte es gran teatro y drama, y el final es abierto. Queríamos dar un gran marco a este drama».

Coe, entretanto, afirmó que el Reino Unido es un «territorio comprometido con el atletismo», que busca volver a ser atractivo tras escándalos de doping y corrupción.

Los Mundiales de la capital británica rompieron récord de asistencia, con más de 700 mil entradas vendidas en el Estadio Olímpico, y probablemente serán recordados por la despedida sin gloria del jamaiquino Usain Bolt, bronce en los 100 metros e incapaz de terminar el relevo 4×100 por lesión.

Asimismo, el héroe local Mo Farah, que también se despedía, no pudo lograr un nuevo doblete, tras ganar la prueba de los 10 mil metros el primer día, pero apenas alcanzar el bronce en los 5 mil el sábado.

Pero Bolt no solo será recordado por sus títulos, sino también «porque tiene una opinión y un punto de vista (…)», señaló.

«Necesitamos más atletas cercanos, menos pendientes de los agentes y de los promotores», añadió.

Coe afirmó que el atletismo tiene «una gran abundancia de talento», por lo que los retiros de Bolt y Farah «darán la oportunidad de fijarse en talentos jóvenes», como el joven sprinter estadounidense Christian Coleman.

Por lo demás, el dirigente expresó que el funcionamiento de los Mundiales será examinado, en momentos en que la IAAF está lista para cambiar formatos y entrar más de lleno en el mundo de las redes sociales.

«Si no lo entendemos ahora mismo seremos un recuerdo feliz pero no habrá trampolín para el futuro de nuestro deporte», advirtió.

Las próximas dos citas Mundiales, en Doha (2019) y Eugene (2021), serán una buena prueba en ese sentido.

«Sabemos que vamos a países en los que el atletismo no goza de tanto apoyo», convino. «Pero trabajaremos duro y comenzaremos más temprano con la organización, para que esos Mundiales también sean un éxito», concluyó.

Artículo anteriorTrump dice que KKK y neonazis son «criminales y matones»
Artículo siguienteJustin Thomas remonta y gana el PGA Championship