SAN JOSÉ, Costa Rica
AP
Algo aturdido por lo ocurrido, Jurgen Klinsmann pronunció cuatro veces la frase «momento amargo» en su comparecencia ante la prensa. Describió el aplastante 4-0 sufrido ante Costa Rica por las eliminatorias de la Copa Mundial como «la derrota que más ha dolido» en sus cinco años como técnico de Estados Unidos.
¿Llegó la hora para un nuevo estratega?
Después de perder sus dos primeros partidos del hexagonal final de la CONCACAF, la dirigencia de la federación estadounidense de fútbol expresa confianza, y paciencia, con el proyecto del alemán Klinsmann.
«No tomamos decisiones inmediatamente después de los partidos», afirmó Sunil Gulati, el presidente de la federación estadounidense. «Vamos a estudiar lo ocurrido hoy, hablaremos con Jurgen y se analizará la situación».
La derrota 2-1 como local ante México el viernes y el noveno revés de visita a Costa Rica por las eliminatorias dejó a Estados Unidos en el último lugar, su peor arranque en una hexagonal.
Tras ser ratificado para dirigir a Estados Unidos en un segundo ciclo mundialista, las críticas a Klinsmann arrecian. Sus detractores sostienen que el equipo está atascado y que el entrenador no tiene ideas para sacudirlo.
«Entiendo que se me van a decir muchas cosas cuando pierdes dos partidos y especialmente si son dos partidos seguidos de eliminatorias», dijo Klinsmann tras la derrota ante Costa Rica. «Así es éste trabajo».
Delantero de la selección de Alemania Occidental que salió campeona en el Mundial de 1990 y entrenador que llevó a la anfitriona Alemania a las semifinales en 2006, Klinsmann reemplazó a Bob Bradley tras un decepcionante desempeño de Estados Unidos en la Copa de Oro de 2011, en la que cayeron 4-2 ante México en la final.
Klinsmann sacó campeón a Estados Unidos en la Copa de Oro de 2013 y les llevó a la segunda ronda del Mundial de Brasil 2014, en el que perdieron ante Bélgica en una prórroga. Pero cayeron contra Jamaica en las semifinales de la Copa de Oro 2015 y perdieron un partido ante México por una plaza a la Copa Confederaciones, desatando cuestionamientos sobre sus tácticas.
Repuntaron en la Copa América Centenario este año, con victorias ante Paraguay y Ecuador para avanzar a las semifinales, instancia en la que perdieron 4-0 contra Argentina.
Aunque el arranque de la hexagonal no pudo ser peor, el margen de error es más amplio. Los tres primeros se clasifican directamente a Rusia 2018 y el cuarto avanzará a un repechaje contra el quinto de Asia.
Pero esto no aplacará a los hinchas estadounidenses al abrirse un compás de espera de cuatro meses para los siguientes partidos, con un duelo de local ante Honduras, el 24 de marzo, y una visita a Panamá, cuatro días después.
«Este es un momento en el que nos toca reflexionar sobre lo ocurrido en los últimos 10 días para consultar bastante con los jugadores, con el equipo», dijo Klinsmann.
Estados Unidos no suele cambiar de técnico en plena marcha de las eliminatorias. El único antecedente fue en el proceso para Italia 1990, en el que Bob Gansler reemplazó a Lothar Osiander en enero de 1989, cuando la federación decidió darle el estatus de tiempo completo al puesto. Gansler logró la clasificación, la primera de Estados Unidos en 40 años.
Gulati, presidente de la federación durante la última década, es metódico a la hora de tomar decisiones, en las que procura recibir consejo de sus colegas de directiva y asesores.
«¿Este fue un resultado humillante? Sí. Pero no me siento avergonzado por el equipo. Estoy decepcionado, lo que es obvio».
