Nueva York
DPA
La alemana Angelique Kerber dio un paso más en busca de la número uno del mundo al vencer ayer a la checa Petra Kvitova e instalarse en los cuartos de final del Abierto de los Estados Unidos de tenis.
La número dos del mundo derrotó a la checa, décimo cuarta preclasificada, por 6-3 y 7-5 en un duelo que se extendió por una hora y 28 minutos en el estadio Arthur Ashe del complejo de Flushing Meadows.
En un duelo de jugadoras zurdas y potentes, la alemana se mostró más agresiva sobre el saque de su rival y, con tres quiebres en el parcial, se llevó el set inicial para empezar a encarrilar la victoria. La clave del éxito de Kerber estuvo en su regularidad, ya que apenas cometió ocho errores no forzados en todo el partido.
Más parejo estuvo el segundo set, sin quiebres hasta el duodécimo juego, cuando una doble falta de la checa le dio la victoria a la vigente campeona del Abierto de Australia.
«Sabía que tenía que jugar mi mejor tenis para poder ganarle a Kvitova», aseguró la alemana, medalla de plata en los Juegos Olímpicos. «Cuando se me presentan los desafíos, trato de sacar lo mejor de mí».
Con esta victoria, Kerber le puso presión a Serena Williams, que ahora necesita llegar a la final para mantenerse en la cima del ranking mundial. Sin embargo, la germana asegura que esa posibilidad no le quita el sueño.
«Es fácil, disfruto cada momento y sólo vengo a jugar mi mejor tenis. Si sucede un día (ser la número uno), bienvenido, pero creo que todavía falta mucho camino para eso. Mi objetivo es avanzar en cada ronda», remarcó.
En tanto, la italiana Roberta Vinci y la danesa Caroline Wozniacki volvieron a dejar en claro que el US Open les sienta bien, al clasificarse a los cuartos de final gracias a las victorias que lograron hoy.
Vinci, séptima favorita y finalista en 2015, logró su pasaje a los cuartos gracias a su victoria por 7-6 (7-5) y 6-2 ante la ucraniana Lesia Tsurenko. La italiana, que el año pasado cortó en las semifinales el sueño de Serena Williams de ganar el Grand Slam, espera ahora a Kerber.
«Estoy con algunos problemas, pero me siento feliz por haber ganado hoy», remarcó Vinci. «No quiero pensar en mi lesión. Voy a tratar de recuperarme hoy y mañana, y así enfocarme en la siguiente ronda», añadió la italiana, que contó que tiene una molestia en el tendón de la pierna izquierda.
«También tengo un poco de dolor en la espalda. En realidad, bastante dolor, pero no quiero pensar en eso», expresó la veterana jugadora de 33 años.
Para Wozniacki, el US Open también trae grandes recuerdos, después de haber llegado a la final en 2009 y en 2014 y ser semifinalista en 2010 y 2011. Y tras una temporada plagada de lesiones, la ex número uno del mundo está mostrando un gran nivel, con el acceso garantizado a los cuartos de final.
La danesa, que ya había eliminado a la rusa Svetlana Kutznesova, avanzó hoy a la siguiente instancia al derrotar por 6-3 y 6-4 a la estadounidense Madison Keys, octava favorita.
En Australia y en Wimbledon, la tenista que ahora ocupa el puesto 74 en el ranking mundial se había despedido en la primera ronda, mientras que en Roland Garros no había jugado por lesión. Desde hace dos años que no lograba meterse entre las ocho mejores de un gran torneo.
Su próxima adversaria será la sorprendente letona Anastasija Sevastova, que estuvo retirada durante 18 meses entre 2013 y 2015 por lesiones y falta de motivación.
Después de vencer por 6-4 y 7-5 a la británica Johanna Konta, la tenista báltica ya firmó hoy el mejor Grand Slam de su carrera. En la segunda ronda, Sevastova había dado la gran sorpresa al eliminar a la española Garbiñe Muguruza.
