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Real Madrid y Atlético de Madrid se enfrentarán mañana sin margen de error en la Liga Española, que lidera con comodidad el Barcelona, distanciado en nueve puntos del acérrimo rival realista y ocho del rojiblanco, cuando restan 13 fechas por disputarse.

El clásico ciudadano siempre levanta pasiones en la capital, pero en esta ocasión dejará irremediablemente atrás a uno de los grandes opositores al campeonato; o a los dos, en caso de reparto de puntos.

Incluso algunos, como el lateral del Atlético Filipe Luis, ya dan la liga por perdida. «Independientemente de lo que pase en el ‘derbi’, ya hemos dicho adiós. El Barsa está muy por encima de todos», opinó el internacional brasileño el miércoles, tras el empate de su equipo, 0-0 con el PSV Eindhoven por los octavos de final de la Liga de Campeones.

La montaña está considerablemente inclinada para ambos clubes madrileños en el torneo doméstico, tras sus respectivos tropiezos la semana pasada, cuando no pudieron pasar de respectivas igualadas: el Madrid niveló 1-1 en Málaga, quedando con 54 puntos en la clasificación, y el Atlético firmó un 0-0 de local ante Villarreal, conformándose con 55 unidades.

El Barcelona, que recibe al quinto clasificado Sevilla el domingo, al cierre de la 25ta fecha, cuenta 63 puntos y va lanzado rumbo a su título liguero número 24. Los azulgranas también han clasificado ya a la final de la Copa del Rey, que pelearán también con el cuadro sevillista, y el martes encarrilaron su pase a los cuartos de final de la Champions, tras ganar 2-0 en octavos al Arsenal con doblete del argentino Lionel Messi, y la vuelta programada en feudo catalán.

En total, el equipo azulgrana acumula 33 partidos seguidos invicto en todas las competiciones, nuevo récord de la entidad y a uno de la mejor marca para un club español, propiedad del Madrid de la temporada 1988-89.

El Madrid, que ejercerá de local en el clásico y no gana en la liga al Atlético desde 2013, no parece llegar tan entero al tramo decisivo de la temporada, posiblemente mermado en lo físico tras el cambio de entrenador hace ocho fechas. Pese a la reciente pérdida de puntos en Málaga, el actual técnico Zinedine Zidane quiso mandar un mensaje optimista acorde al gen ganador del equipo blanco, aunque la realidad expone la Champions como objetivo más asequible, a la par que deseado.

A la ilusión inicial que despertó el nombramiento de Zidane ha seguido un desempeño irregular, con goleadas caseras y problemas a domicilio, donde los «merengues» se han dejado 16 de 36 puntos posibles.

La fragilidad física de Gareth Bale, todavía renqueante de sus dolencias musculares, sigue limitando las posibilidades del equipo, que tampoco encuentra el tono en el mediocampo, con prestaciones reducidas del alemán Toni Kroos y el colombiano James Rodríguez respecto a la campaña anterior. El defensa Pepe también se antoja baja para el sábado, y el goleador Karim Benzema sigue en duda.

El Atlético tampoco alcanza el clásico en su mejor momento, y podría acusar el cansancio del partido de Champions, que ya se cobró en modo de lesión al central Stefan Savic, aunque el uruguayo José Giménez sí integrara la convocatoria tras superar su partido de sanción.

La fecha inicia hoy con el duelo Eibar-Las Palmas, mientras que el sábado se disputarán los duelos Málaga-Real Sociedad, Getafe-Celta de Vigo, Sporting de Gijón-Espanyol, Betis-Rayo Vallecano. El domingo se jugarán el Villarreal-Levante, Athletic de Bilbao-Valencia y Deportivo La Coruña-Granada.

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