Fernando Mollinedo C.
Historiador y columnista Diario La Hora

Para incrementar el acervo cultural de los lectores del Suplemento Cultural de LA HORA, compartimos la investigación que realizamos respecto de tan ilustre personaje, cuyo apellido durante las últimas décadas ha sido muy mencionado por ser en principio una Brigada del Ejército y en segundo lugar porque allí funciona una de las cárceles del Sistema Penitenciario donde están recluidos personajes de la política, comercio, industria, banca, ex funcionarios de gobierno acusados de graves delitos.

En el Ejército de Guatemala y la población en general, son pocos los oficiales y civiles que conocen la vida y obra de José Víctor Ramón Valentín de las Ánimas Zavala y Córdova, un militar guatemalteco que descolló por sus méritos personales dentro y fuera de la institución castrense.

Nació en ciudad Guatemala el 2 de noviembre de 1815 hijo de José Víctor de Zavala y doña María Ignacia Córdova y durante sus años adolescentes (12) fue enviado con su hermano Manuel a los Estados Unidos de América para obtener una educación superior a la del medio de la población guatemalteca; a su retorno inició estudios jurídicos en la Universidad, pero optó por incursionar en la vida militar.

Se desconoce cómo y cuándo fueron sus inicios en la carrera castrense; noticias de ello se inicia cuando se incorporó al Ejército como teniente de infantería para sofocar los levantamientos campesinos comandados por Rafael Carrera (José Rafael Carrera Turcios o Raca Carraca como también se le conoció), de quien irónicamente fue amigo íntimo.

Debido a su educación en los Estados Unidos de América, dominaba los idiomas inglés y francés; sumado a sus características personales se le agregaron las vinculaciones que tenía con la sociedad, producto de su primer matrimonio con la señora Josefa Nájera y Letona, prima del principal consejero de Estado del presidente Carrera; su prima Adela García Granados y Zavala estaba casada con don Luis Batres Juarros quien ejerció el mayor influjo en el Partido Conservador.

Se casó en segundas nupcias con doña Emilia Palomo de Rivera y de Castillo. La primera esposa tenía familiares conservadores y la segunda con políticos liberales. Otra de sus primas estaba casada con don Juan Pavón y Aycinena, hermano de don Francisco Pavón otro personaje que junto con Batres se decía que manejaban a Carrera (la familia Pavón fue la más pudiente de la época) lo que explica por qué pudo ser el bastión de los gobiernos durante los opuestos regímenes de la época archiconservadora de los 30 años y archiliberal de la Reforma.

En 1844 Rafael Carrera asumió la Jefatura del Estado de Guatemala, y como había un movimiento guerrillero en el oriente del país y la iglesia no pudo persuadir a los rebeldes con su doctrina, Carrera formó su estado mayor con el Capitán José Víctor Zavala joven de ideas avanzadas que se mostraba como independiente y valeroso. Fue nombrado Corregidor de Suchitepéquez.

GUATEMALA NACIÓ COMO REPÚBLICA. El 15 de septiembre de 1848, la Asamblea Constituyente ratificó el Decreto de Gobierno Número 15 de fecha 21 de marzo de 1847 teniendo en consideración el precepto que disponía que, al romperse el Pacto Federal, Guatemala recobraría su independencia total, y dispuso que el Estado de Guatemala, se convirtiera en una República y la Nación sería libre, soberana e independiente.

En 1853, Honduras por órdenes del presidente hondureño general Trinidad Cabañas se declaró la guerra a Guatemala e invadió el territorio nacional habiendo llegado hasta Chiquimula donde el ejército guatemalteco los derrotó; el presidente Carrera concibió la atrevida idea de sorprender al Castillo de San Fernando en Omoa, a donde huyó el ejército hondureño, Pero llevó consigo a José Víctor Zavala quien entonces poseía el grado de teniente coronel y le dio la orden de marchar a la vanguardia de un batallón, previniéndole que atacara la Fortaleza hasta tomarla, quedándose el General en Jefe en un punto distante a dos leguas de Omoa, Zavala salió con un aproximado de mil hombres del puerto de Izabal con dirección a Omoa.

La toma de la antigua fortaleza presentaba dificultades y para vencerlas la puso en asedio durante tres días cuando se rindió por capitulación el 24 de agosto de 1853. Rafael Carrera llenado su objetivo después de permanecer unos días en el Castillo lo abandonó y se trajo las primeras piezas de artillería para Guatemala consistentes en los cañones que actualmente están puestos en el frontispicio del edificio de la antigua Escuela Politécnica en la Avenida de la Reforma en la ciudad capital de Guatemala.

En fecha 16 de abril de 1854 un terremoto sacudió a El Salvador por lo que el gobierno de Rafael Carrera envió al General Zavala con una fuerte suma de dinero, y ayuda consistente en víveres y demás auxilios para los damnificados. Por ese tiempo, la carestía de la vida en Guatemala era demasiado alta por lo que el gobierno decidió derogar los impuestos a la importación y exportación de comestibles, dictó leyes que imposibilitaron el monopolio del comercio y fomentó la producción del campo.

A su vez, levantó los ánimos de la población anunciando el nombramiento del coronel José Víctor Zavala como General de Brigada, confiriéndole la Jefatura de las Fuerzas Armadas.

En 1853 fue electo presidente en Nicaragua el conservador Fruto Chamorro; los liberales Francisco Castellón y Máximo Jerez se reunieron en Honduras y comenzaron a luchar contra los conservadores; contrató a 200 milicianos estadounidenses que al mando de William Walker llegaron a Nicaragua en el año 1855. Chamorro murió y dejó el mando a José María Estrada.

El Presidente Carrera de Guatemala envió al Coronel Zavala en misión diplomática a El Salvador a pedir permiso para que pasara el ejército guatemalteco integrado por 500 soldados y oficiales comandado por el General Mariano Paredes hacia Nicaragua a combatir contra William Walker; El Salvador no sólo concede el permiso, sino que también se une a esa lucha; estando allí, José Víctor Zavala recibe la orden de incorporarse al ejército guatemalteco rumbo a Nicaragua, contaba con 42 años y con el rango de teniente coronel participó en la guerra nacional de Nicaragua al ser ésta invadida por las fuerzas filibusteras de William Walker en abril de 1856.

El 17 de mayo de 1856 el gobierno de los Estados Unidos de América reconoció oficialmente al gobierno de William Walker y a éste como presidente de Nicaragua, sin embargo, no le prestó la ayuda necesaria para consolidar su incipiente presidencia.

La muerte del expresidente y jefe del ejército guatemalteco General Mariano Paredes a causa de haber contraído el cólera morbus el 12 de octubre de 1856 en Granada, Nicaragua hizo que José Víctor Zavala tomara por ley el mando del contingente guatemalteco como recompensa a su intrepidez y capacidades demostradas en varias oportunidades y circunstancias.

William Walker fue un médico (Pensilvania, 1843), abogado (New Orleans, 1845), periodista y mercenario estadounidense que organizó varias expediciones militares privadas a México y América Central con la intención de establecer colonias de habla inglesa bajo su control personal; usurpó la presidencia de Nicaragua en julio de 1856 y gobernó hasta el 1 de mayo de 1857.

Durante la estadía del contingente del ejército guatemalteco en Nicaragua, se suscitaron problemas personales entre los jefes de los ejércitos de Nicaragua, Honduras y El Salvador puesto que deseaban tomar la dirigencia del ejército conjunto desplazando a José Víctor Zavala quien de manera espontánea y natural había tomado la jefatura y los soldados le tenían confianza por ser joven y aguerrido, contrario a los otros jefes quienes exhibían ya un cúmulo de años que no les permitían tomar acciones riesgosas de batalla.

Las tropas de Walker fuero vencidas en el año 1857 cuando tenía 34 años, fue expulsado de la presidencia y del país por la coalición de ejércitos centroamericanos y especialmente por las estrategias militares utilizadas por José Víctor Zavala en las batallas, escaramuzas o ataques a las fuerzas de William Walker; circunstancia que le valió ser ascendido al grado militar de coronel, algunos historiadores indican que fue ascendido al grado de Brigadier.

Zavala fue comisionado para custodiar a William Walker hasta el puerto de San Juan del Sur donde estaba una nave en la que se volvería a Estados Unidos; agradecido Walker por la caballerosidad con que Zavala lo escoltó, le obsequió un ejemplar de La Eneida con anotaciones del mismo Walker.

Con el rango de Mayor General del Ejército bajo las órdenes del General Rafael Carrera, en 1857 planificaron en Jutiapa teniendo como objetivo principal la toma de la ciudad de Sonsonate. Para el efecto comandó una brigada compuesta por 1,300 hombres que lucharon contra el ejército de El Salvador obteniendo la victoria sobre el ejército del presidente salvadoreño Gerardo Barrios.

Zavala adquirió tanto prestigio que el propio Rafael Carrera llegó a desconfiar se su lealtad, sin embargo, en tiempos de paz cultivó el género lírico tal cual lo demostró en el cumpleaños de Carrera en 1864 como asunto inusual, Zavala escribió:

“Al Excmo. Sr. presidente
Cap. Gral. Dn. Rafael Carrera,
en su cumpleaños, un amigo
dedica el siguiente

SONETO
Voy la lira á pulsar, por vez primera
Con el objeto, Rafael, de saludarte
En tu día feliz, y de desearte
Una dicha completa y duradera

Mayor aún que para mí quisiera
Y esta expresión, yo puedo asegurarte,
Del corazón, y no del labio parte:
En la expresión de una amistad sincera,

Cual corresponde a un pecho varonil,
Que con gusto el peligro arrostrará
Por ti, no una sino veces mil.

Y su sangre por ti derramará
Persuádate Rafael, en Guatemala
Mucho te quieren, el que más,
Zavala.

El fundador de la República, presidente Rafael Carrera falleció el viernes santo 14 de abril de 1865 por un ataque de hipo que le persistió durante 10 días, y a pesar de la amistad que tuvieron, Carrera desconfió de las posibilidades liberales del Mariscal de Campo José Víctor Zavala quien se desempeñaba como Diputado. En esa fecha, el político conservador Pedro de Aycinena fue nombrado presidente por el Consejo de Estado, cargo que ejerció hasta que fue designado por la Asamblea como presidente el mariscal Vicente Cerna.

En enero de 1869, a los ojos de la sociedad, de hecho, se consideraba a José Víctor Zavala como el próximo presidente, los conservadores postularon a Vicente Cerna y los liberales postularon a José Víctor Zavala; los votos de la Asamblea fueron: Mariscal Vicente Cerna 31 votos; Mariscal José Víctor Zavala 21 votos, don Luis Molina 3 votos, don Pedro Aycinena 1 voto y 1 voto para don Manuel Echaverría.

Desde la caída del gobierno de Mariano Gálvez en 1838 hasta el año 1871, Guatemala fue gobernada exclusivamente por el Partido Conservador; a este período se le conoce como el Gobierno de los 30 años.

El gobierno conservador se caracterizó por la vuelta a los usos y costumbres coloniales; la iglesia recuperó los privilegios que les quitaron los liberales; sus enormes propiedades les fueron devueltas, la universidad volvió a regirse por los estatutos coloniales y la mentalidad de la población volvió a ser la del hombre de la colonia dominado por la iglesia.

El estado de la Hacienda Pública era lamentable; El gobierno tenía que recurrir a los préstamos forzosos a particulares para hacer frente a los gastos del Estado, tal situación se agravó con la reelección del Mariscal Vicente Cerna.

Durante el gobierno de Rafael Carrera, la mayoría de militares estuvo fiel a los principios conservadores; sin embargo a la muerte de éste, el Mariscal de Campo Serapio Cruz apodado “Tata Lapo” se levantó en armas el 2 de febrero de 1867 tomando la guarnición de Guastatoya; el siguiente paso fue escribirle al Mariscal José Víctor Zavala invitándolo a que se uniera a su movimiento revolucionario tomando en cuenta su derrota en la elección presidencial donde fue electo el Mariscal Cerna, lo que se consideró una reelección prohibida en la Carta Constitutiva de la República de Guatemala (la constitución de esa época).

Las tropas de Vicente Cerna al mando del Mariscal Antonio Solares vencieron al cabecilla del movimiento insurrecto y la población de ciudad Guatemala vio horrorizada la escena macabra de la cabeza decapitada del Mariscal Serapio Cruz y expuesta como un trofeo de guerra sobre una pica.

Entre los insurrectos figuró el ex diputado de la Asamblea Miguel García Granados opositor a los regímenes de Rafael Carrera y Vicente Cerna, por lo que buscó refugio en México por sus opiniones políticas contrarias a dichos regímenes; valga hacer la aclaración que Miguel García Granados y Zavala – el artífice de la revolución de 1871- y José Víctor Zavala eran primos.

El 3 de junio de 1871 en Patzicía, Chimaltenango los jefes y oficiales del ejército suscribieron un acta con los insurrectos, en la que nombraron a Miguel García Granados como presidente de Guatemala y se comprometieron a convocar una Asamblea para redactar el Acta Constitucional del país. El 30 de junio quedó liquidado el régimen político de los 30 años y se abrió para Guatemala la etapa conocida como La Reforma Liberal.

Al estar constituido el gobierno de Miguel García Granados, José Víctor Zavala tuvo a su cargo la Cartera de Guerra y figuró al lado de Rufino Barrios siéndole leal en la campaña de la unión centroamericana al grado de haberle enviado una carta a su sobrino el ex presidente de Nicaragua General Joaquín Zavala, una carta por medio de la cual le sugería que desistiera de su oposición a Rufino Barrios. El sobrino le respondió que en plática con Rufino Barrios éste le aseguró que la unión centroamericana iba a declararse de modo pacífico por la voluntad de los pueblos, por lo que no podía aceptar su propuesta.

José Víctor Zavala dejó de existir el 27 de marzo de 1886 sin dejar herederos, sus restos se encuentran en el montículo 8 en el Cementerio General de la ciudad de Guatemala y a su sepelio se le rindieron los honores militares correspondientes para honrar a tan egregio militar.

En reconocimiento a sus altas virtudes militares y cívicas el Ejército nacional nombró a la ciudad militar construida en la finca El Aceituno erigiéndole un monumento. El 12 de octubre de 1956, en conmemoración el centenario de la guerra nacional contra William Walker y su ejército de filibusteros, el presidente de Guatemala Carlos Castillo Armas sustituyó el nombre de la Base militar “El Aceituno” por el de “Regimiento “Mariscal José Víctor Zavala”; actualmente posee el nombre de “Brigada Militar Mariscal Zavala”.

BIBLIOGRAFÍA:
REVISTA CONSERVADORA DEL PENSAMIENTO CENTROAMERICANO. Volumen II, Número 112, s/e, enero, Managua, Nicaragua. 1970
THE WAR IN NICARAGUA 1855-1857. Según as reported by Frank Leslie’s, Ilustrated News paper. Colección Cultural Banco de América, serie Fuentes Históricas. Editorial y Litografía “San José” S.A. Managua Nicaragua 1976.
BELTRANENA SINIBALDI, LUIS. “FUNDACIÓN DE LA REPÚBLICA DE GUATEMALA” Tipografía Nacional, Guatemala, 1972.
E-GRAFÍA:
https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_V%C3%ADctor_Zavala
https://guerranacional.enriquebolanos.org/images/personajes_biografias

PRESENTACIÓN

¿Quién fue el Mariscal Zavala?

Nos congratula presentar una vez más la investigación que sobre Mariscal Zavala ha realizado Fernando Mollinedo. Es muy sabido para los lectores, la voluntad que tenemos desde este espacio en materia de estudios históricos, creemos que la revisión de los acontecimientos del pasado da luz sobre el presente y fortalece nuestra identidad contra intereses ideológicos impuestos por el poder.

Los protagonistas que salen a luz ofrecen, más allá de sus gestas, la fragilidad de la naturaleza humana y las circunstancias a veces insalvables que los condenan a la tragedia en un teatro que se repite y en el que cuesta encontrar novedad. En el caso de Mariscal Zavala nos hallamos frente al militar de cualidades extraordinarias afanado en la construcción de su ideario político en una vida intensa y riesgosa.

Nuestro historiador resume el significado de Zavala del siguiente modo:

“En reconocimiento a sus altas virtudes militares y cívicas el Ejército nacional nombró a la ciudad militar construida en la finca El Aceituno erigiéndole un monumento. El 12 de octubre de 1956, en conmemoración el centenario de la guerra nacional contra William Walker y su ejército de filibusteros, el presidente de Guatemala Carlos Castillo Armas sustituyó el nombre de la Base militar “El Aceituno” por el de “Regimiento “Mariscal José Víctor Zavala”; actualmente posee el nombre de “Brigada Militar Mariscal Zavala”.

Le invitamos a leer los textos de Dennis Escobar Galicia, Violeta de León Benítez y Heidy Rosaura Marroquín García, estamos seguros de que al tiempo que los disfrutará, será una oportunidad de apertura a maneras distintas de escritura y reconocimiento de la realidad. Mucho ánimo en sus proyectos, demos pasos en la realización de un mundo superior. Recuerde que sí se puede. Ya nos veremos próximamente.

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